El día 12 de agosto de 1689, hace 335 años, se concretaba una fundación, marcada por tropiezos y fracasos
Así también se le conoce a esta ciudad al tener en su historia gran cantidad de fundaciones.
El día 12 de agosto de 1689, hace 335 años, se concretaba una fundación, marcada por tropiezos y fracasos. Reunidas las condiciones mínimas y necesarias para lograr un nuevo establecimiento, es que vio llegar en este día, la nueva villa de Santiago de la Monclova, establecida a un cuarto de legua de la benemérita misión de San Miguel de Aguayo y su inmediato pueblo de San Francisco de Tlaxcala, fundados catorce años antes que la naciente villa de españoles, allá por 1675.
El primer gobernador de la provincia don Alonso de León González, soldado y vecino de Cadereyta en el Nuevo Reino de León e hijo del eximio cronista del mismo nombre, fue comisionado por el virrey Brazo de Plata Melchor Portocarrero y Lasso de la Vega, “conde de la Monclova”, para establecer la que sería la sede de su gobernación, esto con la plena recomendación de un hombre que conocía en los hechos la región en cuestión, a la que en los inicios de la etapa a que hacemos referencia se le denominaba “la Nueva Conversión de Coahuila”, tal recomendante era don Juan de Santiago y de León Garabito, obispo novogálico, con sede en la Guadalajara de Indias.
El fundador de Monclova, Alonso de León, que arribó a la nueva provincia acompañado de veinte jinetes en su mayoría parientes suyos y con ese audaz grupo y con vecinos que en aquellos dos años de 1687 y 1688, acudieron al nuevo e incipiente asentamiento, se mercedaron los primeros solares y se comenzaron a construir las primeras habitaciones, iglesia, usos, acequias, casas reales y vivienda del gobernador.
De aquellos primeros pobladores, hoy recogemos sus nombres, para conocer y reconocer el recuerdo de los primeros vecinos de Monclova: Alférez Rodrigo Flores de Valdés, Miguel Flores de Valdés, Felipe Jiménez, Nicolás Jiménez, casado con María Flores de Valdés, Bernabé Sánchez, casado con Ana Jiménez, Juan Rodríguez, casado con María Jiménez, Pedro Gil, casado con María Jiménez, Francisco Menchaca, casado con Bernarda Jiménez, Salvador de Farías, casado con María González, Antonio González, Juan de Sosa, casado con Francisca Jiménez, Felipe de Lugo, Agustín Ponce, casado con María de la Cruz, Francisco de la Cadena, casado con Agueda Jiménez, Vicente Guerra, casado con María de Cepeda, Simón de San Miguel, casado con Juana de los Santos, José de Maldonado, casado con Gertrudis Villarreal, Juan de la Cerda, casado con María Sánchez, Santiago de Hoyos, casado con María de la Garza Iruegas, Nicolás Flores de Valdés, casado con Antonia del Bosque, José Flores de Valdés, casado con Melchora del Bosque, Hipólito de San Miguel, Pedro del Bosque, Diego García, casado con Ana de Arizpe, Nicolás del Castillo, casado con Tomasa Sánchez, Marcos Hernández, casado con Andrea de Ávila, Antonio Jiménez, casado con Petronila Menchaca, Diego de Luna, Miguel Mascorro, casado con Juana de Guzmán, Nicolás Ponce.
Todos estos apellidos todavía prevalecen hoy en día en nuestra ciudad.
Al día siguiente, 13 de agosto del año de esta fundación 1689, el gobernador Alonso de León, levantó el auto de vecindad con el que quedó certificado el asentamiento de estos primeros vecinos de Monclova, a quienes se les ordenó edificar sus viviendas, con el ánimo de promover la más rápida consolidación, en lo que cabe mencionar que ya desde un año antes de la fundación definitiva, asistía como primer párroco el bachiller don Toribio García de Sierra, quien inició el primer libro de bautismos de la Parroquia de Santiago.
El 12 de enero de 1690, se procedió al remate del agua de propios, una posesión de la autoridad que se rentaba para con su ganancia, satisfacer algunas necesidades del gobierno de la villa, agua que ese año se adjudicó por primera vez a don Marcos Hernández en cantidad de “cuarenta y cinco pesos cada un año de renta por el tiempo de tres años”.
Se abocaron junto con el gobernador desde un primer momento a nombrar para componer el cabildo, a su alcalde, regidores, procurador y alguacil, cargos concejales necesarios en la nueva población, para 1690 se conforma el primer ayuntamiento de la villa de Santiago de la Monclova, integrado por: Alférez Rodrigo Flores de Valdés, alcalde ordinario, Diego García, regidor de primer voto, Santiago de Hoyos, regidor de segundo voto, Felipe Jiménez, procurador, Agustín Ponce, alguacil de cabildo.
La historia de nuestra ciudad, sin duda, ha transitado por muy diversos momentos en el devenir de tantos y tantos acontecimientos de los que el vecindario ha sido testigo, desde la etapa colonial y su proceso de asentamiento de pueblos y misiones, hasta la consumación de la Independencia y la posterior lucha por la sede de la capital coahuiltejana, con una renovada y profunda vocación militar a mediados del siglo XIX y un entregado espíritu de empresa y desarrollo en la época de la paz porfiriana, el arribo del ferrocarril internacional mexicano en 1884, posteriormente la revolución de 1910 que tuvo como escenario a Monclova y buen número de sus hijos nutrieron los contingentes que lucharon por un México más justo.
Ya en 1942, cambiando todo un estilo de vivir, Monclova entró en una etapa dinámica, con costos y beneficios, que produjo el resultado de lo que hoy tenemos, reto presente para quienes aquí nacieron, para quienes vinieron y simplemente para quienes hoy formamos esta comunidad, la del desarrollo regional, la del trabajo duro y diario, la del porvenir, en fin la Monclova de la prosperidad. Vaya este escrito como un reconocimiento a nuestros fundadores, quienes dejando otras tierras, forjaron los cimientos para poder ser lo que hoy somos y tenemos. Feliz 335 Aniversario.
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