La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha revelado cifras alarmantes, indicando que diariamente más de un millón de personas entre 15 y 49 años contraen una ITS curable. Este problema global plantea serios desafíos para la salud pública, ya que muchas de estas infecciones no presentan síntomas visibles, dificultando su detección y tratamiento oportuno.
La falta de síntomas en la mayoría de las ITS es uno de los mayores obstáculos en la lucha contra estas enfermedades. Sin señales claras de infección, las personas continúan con sus actividades cotidianas sin buscar atención médica, lo que facilita la propagación de las infecciones.
La doctora Jessica Adriana Rayas Rosales, Gerente de Contact Center de M de Mujer, destaca que, aunque ha habido avances en la prevención y tratamiento de las ITS, algunas infecciones siguen siendo un problema significativo de salud sexual en muchos países.
La clamidiasis es una de las ITS más comunes y afecta tanto a hombres como a mujeres. Esta infección puede tener consecuencias graves, como la infertilidad y el embarazo ectópico. En 2020, se reportaron aproximadamente 128.5 millones de nuevas infecciones de clamidiasis. La incidencia de infertilidad tras sufrir una enfermedad pélvica inflamatoria es del 13%, aumentando al 35% después de dos episodios y al 75% después de tres o más episodios.
La gonorrea es otra infección común que, en mujeres, a menudo no presenta síntomas. Si no se trata, puede causar infertilidad y problemas durante el embarazo. En hombres, los síntomas incluyen dolor o ardor al orinar, secreción por el pene y, en algunos casos, dolor en los testículos. En 2020, se registraron 82.4 millones de nuevas infecciones de gonorrea a nivel mundial.
La tricomoniasis es una infección causada por el parásito Trichomonas vaginalis. Según la OMS, en 2020 se registraron aproximadamente 156 millones de nuevos casos a nivel mundial. El 70% de las mujeres infectadas presentan flujo vaginal como síntoma principal, mientras que aproximadamente el 15% de los hombres desarrollan uretritis.
La transmisión de las ITS no se limita únicamente a las relaciones sexuales sin protección. Compartir objetos personales como juguetes sexuales o entrar en contacto con superficies contaminadas, como en hoteles y sex shops, también puede ser una vía de infección. Esto subraya la importancia de una buena higiene y la adopción de medidas preventivas en diferentes aspectos de la vida cotidiana.
En 2020, aproximadamente 374 millones de personas contrajeron alguna de estas infecciones, lo que pone en evidencia la necesidad urgente de intensificar los esfuerzos de prevención y educación sobre las ITS. Las campañas de concientización deben enfocarse en la importancia del uso de preservativos, la necesidad de hacerse pruebas regularmente y la búsqueda de tratamiento oportuno para evitar complicaciones graves.
Abordar el problema de las ITS requiere un enfoque multidimensional que incluya la educación sexual integral, el acceso a servicios de salud y la promoción de prácticas sexuales seguras. Es crucial que los gobiernos, las organizaciones de salud y la sociedad en general trabajen juntos para crear un entorno donde las personas se sientan cómodas y seguras al buscar información y tratamiento para las ITS