Ángela Aguilar parece haber confirmado que está esperando a su primer hijo, tras la difusión de un video en el que se le observa con un vientre abultado, lo que ha avivado los rumores. La cantante compartió en su cuenta de Instagram una historia en la que lleva una medalla de la Virgen de la Dulce Espera, una imagen religiosa muy popular en Sudamérica a la que se encomiendan las mujeres que desean quedar embarazadas y tener un embarazo saludable.
El 24 de julio pasado, Ángela Aguilar y Christian Nodal contrajeron matrimonio en una exclusiva hacienda en el estado de Morelos. La organización apresurada del evento, el reducido número de invitados y el hecho de que muchos recibieron la invitación con poca anticipación, alimentaron la especulación de que la pareja está esperando a su primer hijo.
Aunque los rumores disminuyeron después de que Ángela Aguilar fue vista fumando durante un concierto de Christian Nodal en Mazatlán, Sinaloa, sus recientes publicaciones han vuelto a poner el tema en el centro de atención en los medios y redes sociales.
La Virgen de la Dulce Espera, una de las advocaciones marianas más veneradas, representa el momento en que María, la madre de Jesús, está embarazada. Esta imagen se asocia con el Adviento, la espera de la Natividad de Cristo, y simboliza la esperanza de un nuevo comienzo, tanto espiritual como en la vida de las familias.
La devoción a la Virgen de la Dulce Espera tiene raíces profundas en la historia del cristianismo, con referencias que datan del siglo V, convirtiéndola en una de las primeras imágenes de culto en la tradición cristiana. Esta advocación de María embarazada es considerada por la Iglesia Católica como la “Patrona de las madres que esperan un hijo” y ha sido un faro de fe y esperanza para muchas generaciones.
El significado de la Virgen de la Dulce Espera va más allá de la simple espera de un hijo, representando la esperanza en el milagro de la vida y la confianza en un embarazo y parto normales. A María se le encomiendan no solo las mujeres embarazadas, sino también aquellas que enfrentan dificultades para concebir, así como parejas que buscan adoptar.
La devoción a la Virgen de la Dulce Espera se celebra con especial fervor el día 15 de cada mes, cuando se bendicen y entregan pequeños zapatitos de lana a las mujeres en su octavo o noveno mes de gestación. Esta tradición, que combina fe y esperanza, busca pedir la protección y salud tanto de la madre como del futuro bebé. Un mes después, muchas madres regresan a la iglesia con sus recién nacidos para agradecer a la Virgen por el éxito de sus partos.
Aunque el culto a la Virgen de la Dulce Espera tiene presencia en México, es más popular en países de Sudamérica como Argentina. Es importante destacar que la familia materna de Ángela Aguilar es originaria de ese país, lo que ha llevado a la cantante a declarar en ocasiones que siente una fuerte conexión con sus raíces.