Al cierre de 2023, los casos de omisión de cuidado de niños, en Saltillo disminuyeron en un 17 %, respecto a 2022, según datos proporcionados por la Unidad de Integración Familiar de la ciudad.
Patricia Moreno, directora de la unidad, señaló que, durante el 2023, fueron atendidos 964 casos, mientras que al cierre de 2022 se reportaron 1 mil 162 casos de falta de cuidado de niños, principalmente al oriente de la ciudad.
Los meses con mayor incidencia en el 2023 fueron septiembre con 114 casos y junio con 109. Contrario a lo pronosticado en diciembre se registró una baja en el número de casos, cerrando el mes con 61 reportes de este tipo, siendo la primera quincena del mes cuando se registró una mayor incidencia.
Durante los primeros días de enero de 2024 solo se registraron 2 casos, lo que significa una reducción del 90 por ciento respecto a lo registrado en el mismo mes de 2023, cuando se atendieron 71 reportes de este tipo, es decir, de 15 a 20 casos por semana.
La funcionaria recordó que la omisión de cuidado de los niños no radica solamente en la falta de vigilancia de los niños o que permanezcan en las calles a altas horas de la noche, sino que el dejar que un menor utilice por largos periodos de tiempo celulares o tabletas viendo contenido inapropiado para su edad, que no cuente con una buena alimentación y que sea ignorado cuando quiere contar algo, también es una omisión.
“Hay lecturas que dicen que los padres tienen de 15 a 20 minutos al día para saber cómo le fue a su hijo en la escuela, por eso es importante recogerlo porque se sabe en su rostro cómo le fue. El que no haya un buen aseo personal y no se revise la mochila, también es una omisión que afecta a la salud socioemocional de los niños y que podría escalar a otros tipos de violencia”, explicó.
La directiva atribuyó la disminución de los números a las diferentes estrategias implementadas por la unidad, como platicas y talleres para padres en las escuelas, que han generado una conciencia en las familias.
Así mismo, señaló que las estrategias deben ser reforzadas por la comunidad realizando los cuidados pertinentes durante la infancia de los menores como los de salud física, emocional y cuidado de su cuerpo.
