El derrumbe parcial de techos en cinco propiedades, incluyendo la parroquia del ejido Reynosa, así como grandes encharcamientos y casas inundadas en las zonas urbana y rural, es el balance provisional reportado por la Unidad de Protección Civil del municipio de San Pedro.
Estos daños fueron causados por las intensas lluvias que se produjeron durante la madrugada y la tarde del domingo, una cantidad de precipitación que no se había visto en muchos años.
El jefe del Departamento informó que las lluvias continuaron de manera intermitente y con menor intensidad durante el lunes y martes, pero destacó que la lluvia del domingo fue particularmente notable.
Empezó en la madrugada, disminuyó un poco, y alrededor de las 5 de la tarde se intensificó nuevamente. Se estima que la precipitación superó los 50 milímetros, en comparación con los 26 milímetros pronosticados por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
El funcionario mencionó que los derrumbes de techos ocurrieron en tres viviendas del área urbana, una en el ejido Candelaria y en la Iglesia de Reynosa. En cuanto a las áreas con mayores acumulaciones de agua, se identificaron puntos críticos en la avenida Treviño, la colonia Ampliación Barrio Nuevo, el centro de la ciudad, y en los fraccionamientos Villa del Desierto, Miguel Hidalgo y Barrio de Monterrey.
En este último, no se puede utilizar motobombas para retirar el agua debido a que podría afectar a las colonias cercanas, por lo que se debe esperar a que el agua se drene a través de la red de alcantarillado. En la mayoría de las áreas rurales también se han registrado grandes encharcamientos, con prioridad en el retiro de agua donde existe riesgo de que entre en las viviendas.
“El evento más severo para nosotros fue la madrugada del domingo, cuando la lluvia fue extremadamente intensa. Ayer y hoy la lluvia ha sido más leve, pero los pronósticos indican que continuarán las precipitaciones hasta el viernes. Esperamos que no se registre tanta agua como la del domingo y estamos en alerta, concentrándonos en el retiro de agua con motobombas, priorizando las áreas de mayor riesgo de daño a las viviendas”, concluyó.