A diferencia de otros clásicos, esta vez no habrá una zona designada para la afición visitante
De cara al Clásico Regio: Monterrey-Tigres, que se desarrollará en la casa de los Rayados, la directiva del Monterrey y las autoridades de la ciudad han advertido que ninguna barra de los felinos podrá pisar el llamado Gigante de Acero.
Alberto Molina, director de operaciones de los Rayados de Monterrey, explicó: “El acceso a las barras visitantes está prohibido y así seguirá”.
Para aquellos seguidores felinos que quieran juntarse en el estadio una vez comenzado el juego, también hay prohibición: “Todo el estadio es numerado, tenemos muchos abonos vendidos y eso habilita para que cada quien esté en su lugar. No se puede tener un grupo focalizado de afición visitante”.
El operativo que se implementará para el Clásico del Norte es el mismo que se utilizó para el juego contra el Inter Miami, que se dice, “fue exitoso”.
“Sabemos que hubo un incidente al final del juego (una pelea entre seguidores de ambos equipos), pero de inmediato reaccionamos y se detuvo a esas personas, y se pusieron a disposición de la parte legal y jurídica... El tema ha quedado con ellos. Nosotros cumplimos con el protocolo que nos corresponde”.
De igual forma, indicó que se tienen bien identificados a personas que en ocasiones pasadas han ocasionado algún disturbio en el estadio, “hay procesos judiciales contra ciertas personas identificadas como violentas y las tienen identificadas”. La seguridad claramente estará prevenida por si estas personas intentan ingresar al juego.
Cuidando el terreno de juego vigilado habrá más de 200 colaboradores y se mantendrá la orden de quien se salte la barda sea detenido.
El estadio se abrirá a las 18:30 horas, cuando el juego está programado para comenzar a las 21.
Las policías de Apodaca, Catarina, Monterrey y San Nicolás, colaborarán para evitar violencia durante el Clásico, sumando en total cerca de 1400 elementos.
