Aunque se esperaba lluvia, solo hubo un descenso en la temperatura y nubosidad, permitiendo mejores condiciones para trabajar.
Rogelio Iracheta, dirigente de la Unión de Comerciante Ambulantes en Monclova (UCA) expuso que, durante este fin de semana, el calor ha dado tregua en la localidad, lo que es algo muy positivo para las pulgas de diversos sectores, pues, aunque se tenía pronóstico de lluvia, solo de tuvo un descenso en la temperatura y se nubló, lo que permitió que los vendedores pudieron desarrollar mejor su trabajo.
Destacó que, en la semana anterior, se presentaron temperaturas superiores a los 42 grados, por lo que algunos pulgueros de sectores en los que se trabaja entre semana llegaron a resentir esto de manera negativa, disminuyendo sus ventas de un 20 a un 25 por ciento, pues con el calor sofocante y el fuerte sol, los ciudadanos no salen tan frecuentemente de casa a realizar compras en el exterior y si lo hacen, traten de hacerlo rápido. Incluso, se les da el permiso a los vendedores de retirarse antes, pues si su jornada laboral termina a la una de la tarde, se les pude dar la oportunidad de que vayan a las 12, pues el estar largas horas expuestos a las altas temperaturas también es complicado para ellos.
Beneficio. Aclaró que este sábado, en la pulga de la “Lechería” y la de Praderas, se pudo notar un ambiente de mejoría en las ventas, gracias a que muchos ciudadanos aprovecharon que no hacía tanto calor y que no había sol para poder salir a hacer compras o simplemente a dar un paseo, lo que fue benéfico para las personas que se dedican al comercio ambulante. El dirigente destacó que, en un día de trabajo, los pulgueros comienzan a instalarse en sus espacios asignados de 5 a 7 de la mañana y se tienen que retirar a la una de la tarde aproximadamente, pero con las temperaturas extremas durante primavera y verano, se les tiene que dar un margen de tolerancia en sus horarios, esto para evitar que pierdan su espacio de venta. Esta es una de las alternativas que se implementan para poder seguir trabajando a pesar de las temperaturas sofocantes que normalmente se presentan en Monclova.
