Dichas acciones representan un peligro para quienes buscan empleo.
Lo que parece ser una excelente oportunidad laboral para trabajar en Canadá o Estados Unidos, resulta ser, en muchos casos, un fraude.
A pesar de los esfuerzos de la Secretaría del Trabajo por organizar ferias de empleo destinadas a personas refugiadas, con discapacidad o de edad adulta, los fraudes laborales se dispararon de manera alarmante en las redes sociales durante este año.
La situación ha llegado a tal punto que la Guardia Nacional y la Policía Cibernética han emitido serias advertencias sobre estas ofertas engañosas, que prometen sueldos y beneficios superiores a los de ley, horarios flexibles y exigen poca o nula experiencia.
Lo que parece ser una excelente oportunidad laboral para trabajar en Canadá o Estados Unidos, resulta ser, en muchos casos, un fraude diseñado para robar información personal o dinero, e incluso, en situaciones más graves, para enganchar a jóvenes incautas y forzarlas a salir del país con fines delictivos.
Cinco señales de alerta: Muchas de estas ofertas falsas no requieren experiencia previa. Suelen anunciar vacantes para las que no es necesario tener ningún tipo de experiencia o formación específica. Esto permite a los estafadores recibir un número mucho mayor de aplicaciones, abriendo el abanico de posibles víctimas que, ante la falta de requisitos, creen que tienen una oportunidad laboral accesible y al alcance de la mano.
Además, es común que estas ofertas fraudulentas ofrezcan salarios que parecen demasiado buenos para ser ciertos. Las cifras prometidas son, en la mayoría de los casos, excesivamente altas y muy superiores al promedio del mercado. Para justificar estas remuneraciones poco realistas, los estafadores a menudo se presentan como representantes de grandes compañías de "enorme alcance internacional", lo que da a la oferta una falsa apariencia de credibilidad.
Otra característica común de estas estafas es la presentación de tiempos de contratación extremadamente rápidos. Los delincuentes que operan detrás de estas falsas ofertas no desean que las víctimas tengan tiempo para pensar o investigar, por lo que utilizan la presión del tiempo para forzar una decisión inmediata. La urgencia en el mensaje de "aplicar ahora o perderás la oportunidad" es una técnica recurrente para evitar que las personas reconsideren su decisión.
La señal de alerta más clara para identificar una oferta laboral falsa es cuando se solicita dinero a cambio de comenzar a trabajar. Bajo ninguna circunstancia, una empresa legítima debería pedir a alguien que pague para trabajar. Si una oferta de empleo requiere algún tipo de pago anticipado, ya sea para trámites, supuestos permisos o cualquier otra excusa, es casi seguro que se trata de una estafa.
En respuesta a este preocupante incremento de fraudes, la Guardia Nacional y la Policía Cibernética han reforzado sus esfuerzos para educar al público y prevenir estos engaños, recomendando desconfiar de cualquier oferta que presente estas características. Además, instan a las víctimas de estos delitos a denunciar inmediatamente para ayudar a rastrear a los estafadores y evitar que otros caigan en sus redes.
La Secretaría del Trabajo continuará organizando ferias de empleo reales y seguras, invitando a los ciudadanos a aprovechar estas oportunidades confiables y a mantenerse alerta ante posibles fraudes
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