fue prematuro y su crecimiento paró a los 10 años, pero sus órganos no, así que debe controlarlos.
Con 14 años de edad, pero con una apariencia de un niño, debido a la enfermedad hipopituitarismo hipofisario, que padece, Jesús Ángel Jasso, y su familia piden el apoyo de la ciudadanía para ayudarle a completar su medicamento mensual que le permite mantener sus órganos sin crecimiento, para evitar el riesgo mortal.
Él estudia la secundaria en Apodaca, Nuevo León, pues es atendido en el hospital Universitario y a través del mismo le surten la inyección que debe aplicarse cada mes, pero tiene un costo de 50 mil pesos la cual es subsidiada con el 50 por ciento, así que la familia debe reunir siempre dinero para completarla.
Narración. La madre de Jesús, Diana Michelle Cortés, explicó que su hijo nació prematuro de 5 meses y medio, lo que afectó su desarrollo, además de tener labio leporino que afecta sus encías y recientemente ha sido diagnosticado con el síndrome de klippel-feil, que consiste en un desorden esquelético complejo por la fusión congénica de dos o más vértebras cervicales. "Al principio, me dijeron que no iba a caminar ni hablar y que iba a estar postrado en una cama , pero gracias a Dios y a la gente que me ha ayudado, mi hijo, ya camina, ya habla, está en tercero de secundaria y va a pasar a la prepa, pero el endocrinólogo nos dijo que él ya no va a crecer, que parece de 10 años, así se va a quedar, pero el detalle es que sus órganos siguen creciendo y por eso es el medicamento tan caro que se le está dando para que sus órganos no crezcan y puedan caber en su estómago y el cráneo no se le haga más grande", externó la mamá. Dijo que el medicamento, del cual mostró la receta, es exageradamente caro, de 50 mil pesos y es adquirido en Estados Unidos, pero gracias al apoyo de los gobiernos de Nuevo León y Tamaulipas, ya que de este último estado es donde nació Jesús, ha podido darle el medicamento reuniendo los otros 25 mil pesos por mes. Dijo que es una sola ampolleta por mes y desconoce por cuánto tiempo más la va a requerir, porque si se le suspende y crece su corazón puede ser fatal para él, pues tampoco pueden practicarle una cirugía porque tienen que probar más tiempo dicho medicamento. El padrastro de Jesús trabaja como
"sanblastero", que es la limpieza con arena a presión de tubos, mientras que su madre limpia casas, vende repostería o chicles, de todo un poco. Cortés dijo que son seis los integrantes de la familia, pues ellos cuidan también a su suegra. La familia, cada vez que puede, acuden los fines de semana a Monclova para solicitar la ayuda de la gente y en esta ocasión estuvieron en bulevar Harold R. Pape y Ejército Nacional, donde solicitaban a los automovilistas alguna moneda.
