La piña es una de las frutas más refrescantes que existe. Está constituida por el 85 por ciento de su peso en agua, por lo que además es un alimento con un aporte calórico muy bajo; es rica en fibra, por lo que facilita la digestión y ayuda a las personas que buscan bajar de peso de acuerdo con el sitio Eroski Consumer.
En ocasiones anteriores en Menú, te hemos hablado de los beneficios que le trae a tu salud tomar jugo de piña, pero no solo el jugo de esta fruta es bueno, la cáscara de piña también la puedes aprovechar si la haces en infusión con canela. Conoce más de sus propiedades.
La cáscara de piña contiene una sustancia llamada bromelina, que es una enzima digestiva la cual ayuda a que las moléculas de proteína descompuesta se absorban más rápido en el intestino delgado, esto se comprobó un estudio publicado por la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, en el que algunos pacientes con insuficiencia pancreática experimentaron mejor digestión después de tomar un suplemento con bromelina.
La cáscara de piña concentra además un alto contenido de manganeso, un mineral que es esencial para fortalecer el sistema óseo según indica la Enciclopedia Médica, Así que, si padeces alguna enfermedad en los huesos como la osteoporosis, esta bebida es una excelente opción para ti.
Si le agregas canela a tu infusión de cáscara de piña, tus niveles de colesterol y triglicéridos podrían bajar, pues de acuerdo con un estudio publicado en la revista Annals of Family Medicine, las personas que consumen canela de manera regular experimentan una disminución en los niveles de colesterol y triglicéridos.
Tu memoria también podría mejorar, pues cuando la canela se metaboliza se convierte en benzoato de sodio, una sustancia que podría aumentar los niveles de CREB, una proteína que es de vital importancia para crear recuerdos, de acuerdo con un estudio realizado por la Universidad Rush, en Chicago.
Para hacerla, lo único que necesita hacer es poner a calentar un litro y medio de agua sin dejarla hervir, y agregar toda la cáscara de piña que te haya sobrado con un poco de canela, y dejarla reposar hasta que se enfríe.
