La Entrevista con Maryrene Guzmán
Daniela Cordova / El Tiempo de Monclova'Si te dicen que no puedes, demuestra lo contrario'.
Siendo una niña, Maryrene soñaba con algún día ser una gran doctora, pues para ella un médico era como un superhéroe que ayudaba a todos a su al rededor. Con años de esfuerzo y motivación fue que Maryrene logró concluir sus estudios en medicina y hoy en día es egresada como médico cirujano.
Mencionas que desde niña anhelabas ser doctora ¿Cómo lograste cumplir ese sueño?
“El deseo que tenía desde pequeña en desempeñarme como un médico, solamente se cumpliría si cursaba la licenciatura y así fue porque afortunadamente tuve el privilegio de contar con el apoyo de mis papás y tíos para poder solventar los gastos; la parte de esfuerzo y dedicación, ya iba por mi cuenta, pero poniendo todo de mi parte fue como lo logré”.
Recientemente, terminaste la carrera ¿Hace cuánto tiempo iniciaste a laborar y cuál es la experiencia que has tenido?
“Terminé mi servicio social el 31 de enero del 2023 y el 1 de febrero me incorporé a Salud Municipal y hasta la actualidad, llevando a cabo en estos casi 6 meses las actividades ya mencionadas; de lunes a viernes en turnos matutinos, la mayoría del tiempo, y en el caso del filtro antialcohol y eventos sociales, incluso también fines de semana y en horarios nocturnos”.
Te encuentras inmersa en el mundo laboral ¿Cómo desempeñas tu profesión hoy en día?
“Formo parte del equipo multidisciplinario de Salud Pública municipal, desempeñando funciones como, médico en las distintas actividades que el departamento realiza: brigadas en colonias, campañas de vacunación en escuelas y público general, ferias de salud organizadas por presidencia, en módulos de eventos culturales y recreativos del municipio y últimamente en los cursos de verano impartidos en la Ciudad Deportiva. De igual manera, he fungido como médico certificador en el filtro antialcohol, aunque la mayor parte de mi tiempo, soy médico en el Departamento de Salud a sexo servidoras, donde llevo a cabo la revisión de los pacientes para corroborar su salud y poder otorgarles el permiso a trabajar”.
Hasta el momento, ¿Qué es lo que más satisfactorio que has obtenido de tu trabajo?
“Realmente desde que inicias la universidad, se van presentando situaciones que te van forjando como profesionista, en este caso, como médico. Al entrar al campo clínico las situaciones son más constantes y la satisfacción cada vez es mayor, durante mi año de internado el ser partícipe de poder traer una vida al mundo, es una sensación increíble y poder ayudar día con día a los pacientes y ver sus muestras de agradecimiento es lo que realmente te hace sentir que estás haciendo las cosas bien. Pero sinceramente, la mayor de mis satisfacciones, fue cuando realicé mi servicio social porque el ser médico de una comunidad rural es algo que, aunque actualmente sea un riesgo latente para los médicos en estas situaciones, te marca toda la vida. Experimentas el cómo trabajar con lo más básico insumos, tratar otras costumbres, gente nueva, la responsabilidad de ser la única que puede ayudarlos en una urgencia y el vivir sola, alejada de la vida urbana y con servicios básicos, son un ejemplo de lo que se vive en el servicio social”.
En base a lo que has experimentado ¿Cuáles son algunos de los retos a los que te has enfrentado en tu vida laboral?
“Como lo mencioné el año de servicio social tuvo sus pros y sus contras, fui víctima de la inseguridad a mi persona y a la comunidad. Afortunadamente, no pasó a mayores sólo pérdidas materiales, pero de igual manera, aunque estemos en una lucha constante de igualdad de género desafortunadamente sigue existiendo y no es excepción el área de salud, donde, a pesar de tener mis estudios al igual que mis compañeros masculinos, a las mujeres se nos sigue excluyendo de algunas situaciones no se nos da el crédito justo ante decisiones médicas e incluso, los pacientes hacia nosotras se refieren como “hey tú, señorita” “mija” “muchacha”, cuestión que en los hombres siempre los mencionan como “doctores”, pero es algo a lo que debemos enfrentarnos”.
Dentro de este rubro ¿Cuáles son tus aspiraciones?
“Me encuentro aspirando a una residencia médica en el área de ginecológica y obstetricia. De ser seleccionada este año mi objetivo principal es empezarla, cursarla satisfactoriamente y terminarla en 4 años. Posteriormente, de ser posible, establecerme en mi ciudad, para consulta y poder otorgar salud ginecológica y obstétrica a las mujeres de Monclova y la región”.
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