El contenido que venden en las suscripciones son videos caseros manteniendo relaciones sexuales
Dulce Pareja encontró un trabajo que combinaba su gusto por grabarse teniendo relaciones sexuales y generar 120 mil pesos mensuales; Jakelin y Eduardo confiesan que utilizan el dinero para invertir cerca de 12 mil pesos en sus videos.
Para Dulce Pareja, un par de adultos swinger, grabarse teniendo relaciones sexuales era un hobby, sin embargo, nunca imaginaron que cruzarían fronteras con las suscripciones que venden de OnlyFans, negocio que les permite ganar más de 120 mil pesos mexicanos al mes.
Entrevistados en su departamento al norte de Monterrey, Eduardo cuenta que su sueño, desde los 15 años, era ser un actor porno y hace dos años lo consumó porque la pandemia del covid-19 le permitió grabarse con su novia, Jakelin, y al poco tiempo se volvieron famosos en Twitter.“Siempre quise participar en lo que fue la industria, lo empecé a pensar desde los 15 años y cuando se dio la oportunidad de que se abrieron las plataformas, ya era más independiente y fue cuando hablé con ella, porque desde antes comenzó a grabar y fue por gusto; ya en la pandemia vino a reforzar esto, empezamos a dar el giro y creo que como teníamos la visión de cómo lo queríamos hacer, pues empezó a funcionar rápido”, manifestó Eduardo.
El dinero ganado lo utilizan para trabajar e irse de vacaciones, pues matan dos pájaros de un tiro, dado que trabajan en el contenido, dedicándole dos o tres horas, teniendo libre la mayoría del tiempo.
El contenido que venden en las suscripciones son videos caseros manteniendo relaciones sexuales, y la mayoría de los consumidores se concentran en Estados Unidos y en México.“Del total de seguidores, 30 por ciento es mexicano y 29 por ciento de Estados Unidos, y el resto está en el resto del mundo; hay porcentajes, por ejemplo, de que 0.8 por ciento en Ucrania que nos compran sus suscripciones”, destacó.
Jakelin narró que cuando empezaron a vender contenido, no tuvieron problemas con sus padres ni sus amigos, pues estos lo tomaron con alegría porque ya tenían conocidos de la industria para adultos.“Ya todos saben lo que grabamos, nuestros papás lo comprendieron, las amistades era de qué chingón que estábamos haciéndolo, porque ya conocían alguien que se dedicaba a esto. Creo que no había tanto estigma, el problema realmente es que no comprenden como personas pueden ganar dinero a base de exhibirse, es chistoso”, manifestó la joven.
