A las 8 am se detuvo el elevador en el segundo piso. Empresa OTIS llega cuatro horas después para abrirlo. Policía y Bomberos apoyaron en todo momento.
Velia Montalvo de 52 años y su esposo Miguel Ángel junto con 5 personas más, 2 que iban como ella a realizarse un electrocardiograma, otros dos acompañantes y un visitante de persona hospitalizada jamás imaginó el terror que vivirían al quedar atrapados en el elevador de la clínica 7 del IMSS por espacio de 4 horas.
Las 7 personas iban en descenso desde el tercer piso a la planta baja, pero al llegar al segundo piso, el elevador repentinamente se detuvo iniciando así una nada grata odisea que en definitiva los dejó marcados al grado tal que la paciente aseguró que jamás volverá a subir a un elevador y muchos menos si se trata del IMSS.
Antecedentes. La historia, que por suerte concluyó con el rescate de las 7 personas sin mayor complicación, pero sí con un tiempo de 4 horas se registró en Monclova y se suma a 3 más que recientemente ocurrieron en otras entidades del país; incluso con resultados funestos.
El 11 de julio en una clínica en Playa del Carmen, Quintana Roo, una niña de escasos 6 años murió al ser prensada por el elevador cuando eran trasladadas en el interior para hacerle varios estudios. El IMSS en ese caso sostuvo que era responsabilidad de la empresa que daba mantenimiento a los ascensores.
Posteriormente, el 27 de julio en la clínica 46 en Guadalajara, Jalisco, 8 personas quedaron atrapadas en el elevador. Ellos fueron rescatados mediante un boquete que se tuvo que hacer en el plafón del techo para lograr sacarlos. En la misma ciudad tapatía el día 30 de julio en la clínica 89, también se registró la falla de un elevador en donde quedaron atrapadas 3 personas que fueron rescatadas tras 3 horas de encierro y hasta que llegaron los técnicos de la empresa que da servicio a los ascensores con las llaves correspondientes para su apertura.
El miércoles 9 de agosto aquí en Monclova se repitió la historia. Ahora fueron 7 personas las atrapadas en el elevador a las 8 de la mañana y rescatadas hasta casi las 12 del mediodía. Ellos pasaron hora y media al interior sin poder hacer nada. Gracias a la llamada que desde el interior del ascensor hicieron a sus familiares, estos a su vez llamaron a los bomberos, de donde de inmediato acudieron a prestar el apoyo, logrando en abrir el elevador cerca de las 9:20 minutos. Aunque, se les impidió por “protocolo” del IMSS que rescataran por un espacio de casi un metro a los pacientes, quienes debieron esperar la llegada del personal de la empresa OTIS de Saltillo.
“Íbamos del tercer piso a la planta baja yo iba con mi esposo Miguel Ángel porque venimos a que me hicieran un electrocardiograma, al igual que dos pacientes más que iban acompañadas por sus familiares y una persona que venía a ver un paciente hospitalizado, éramos 7 en total 4 mujeres y un hombre” explicó Velia Montalvo de 52 años.
La odisea. Al salir en silla de ruedas por el área de urgencias la señora Velia que vive en el municipio de Frontera aseguró que los primeros minutos fueron angustiantes, de terror y de zozobra al no saber que estaba pasando “el elevador se detuvo de repente, comenzaron a pasar los minutos y la desesperación se empezó a sentir entre todos, pero mi esposo me decía en todo momento que me calmara que no iba a pasar a mayores que estaríamos bien y ahí fue cuando por celular varios de los que estaban con nosotros dentro empezaron a llamar a sus familiares y de ahí llamaron a los bomberos, explicó.
La paciente dijo que cuando los bomberos consiguieron abrir un espacio en el elevador sintieron un gran alivio y de inmediato se les comenzó a dar atención, se les suministró agua, se instaló un aparato de aire a efecto de evitar complicaciones mayores. Sin embargo, se les dijo que deberían esperar que especialistas llagaran a la clínica para abrir en su totalidad las puertas del elevador y sacarlos sin mayor riesgo. Eso sucedió hasta 5 minutos antes de las 12 del mediodía.
La nada grata odisea que vivieron los cuatro pacientes se registró cerca de las 8 de la mañana. Oficialmente, el IMSS informó que a las 8:30. Al exterior hubo mucha movilización por parte de Bomberos, Protección Civil y Policía Preventiva.
¿Las inversiones? En un corto comunicado de prensa, el IMSS reconoció la falla en el elevador, pero, sin detallar el motivo que originó la falla. Indicando que el ascensor quedó inhabilitado por el momento y que esperan sea en una semana cuando la empresa OTIS de donde llegaron técnicos desde Saltillo tenga en pleno funcionamiento habitual el aparato a más tardar en una semana. En Monclova, al igual que en infinidad de unidades médicas del IMSS, quedó nuevamente demostrado la falta de inversiones y los graves problemas que mantienen un “agonía” el Hospital de Zona número 7 donde pese a los cientos, incluso miles de anuncios que por años se han hecho de supuestas inversiones al final nada llegada y las fallas día con día son más notorias. Apenas dos semanas atrás, en el bloque A también de la clínica 7 el elevador se quedó sin funcionar sin conocerse una explicación por parte de los directivos del instituto. Ayer con el accidente registrado reconocen que hubo fallas, aunque no dicen el origen ni mucho menos cuánto y cuándo verdaderamente será invertido.
