Cuando se hizo público la adquisición de la empresa matriz de Bethesda, ZeniMax, por parte de Microsoft, hubo un gran revuelo. No hacía falta dar muchas explicaciones sobre las razones que llevaron al gigante tecnológico para hacerse con una de las compañías punteras en el sector de los videojuegos. Sea como fuere, ahora sabemos cuál fue el aspecto que desencadenó la compra.
Lo ha revelado Phil Spencer, el jefe de Xbox, en la audiencia de la FTC. Al parecer, una de las razones clave fue la posible exclusividad de Starfield en PlayStation. Spencer reveló que Sony paga regularmente a los competidores para que “se salten nuestra plataforma” y Microsoft sintió que necesitaba poseer Bethesda para competir:
Cuando adquirimos ZeniMax, uno de los impulsos fue que Sony había hecho un trato con Deathloop y Ghostwire... para pagarle a Bethesda para que no lanzara esos juegos en Xbox. Entonces, la discusión sobre Starfield cuando escuchamos que Starfield también podría terminar omitiendo Xbox, no podemos estar en una posición como una consola de tercer lugar en la que nos quedamos más atrás en la propiedad de nuestro contenido, así que hemos tenido que contenido seguro para seguir siendo viable en el negocio.
Cada vez que lanzamos un juego en PlayStation... Sony captura el 30 por ciento de los ingresos que obtenemos en su plataforma y luego usan ese dinero entre otros ingresos que tienen que hacer para tratar de reducir la supervivencia de Xbox en el mercado. Tratamos de competir, pero como dije, en los últimos 20 años no hemos logrado hacerlo de manera efectiva.
Lo que ocurrió después es historia conocida. Microsoft gastó 7500 millones de dólares para adquirir ZeniMax Media, la empresa matriz de Elder Scrolls y el estudio de Fallout Bethesda Softworks. Y si, un tiempo después los primeros frutos están a la vuelta de la esquina con Starfield listo para debutar el 6 de septiembre y la próxima llegada de un juego Indiana Jones de Bethesda, ambos exclusivos para Xbox y PC.
