Juez modificó el arresto a Austin y Solís con base en la Convención Interamericana para los Derechos Humanos de los Adultos Mayores, ratificada por AMLO.
En una maratónica audiencia de casi 11 horas, un juez federal del Reclusorio Norte levantó la prisión domiciliaria a Gilda Margarita Austin y Solís, mamá del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya Austin, que la mantuvo resguardada en su domicilio por más de tres años derivado de las acusaciones de lavado de dinero y asociación delictuosa en el caso Odrebecht.
Sin embargo, la señora de 75 años de edad no podrá salir de la Ciudad de México, del país, tendrá vigilancia personal y permanente al exterior de su domicilio en la alcaldía Tlalpan, además deberá portar un brazalete electrónico.
El juez de Control del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte determinó modificar el arresto domiciliario a Austin y Solís, con base en la Convención Interamericana para los Derechos Humanos de los Adultos Mayores, sobre que los adultos mayores tienen derecho a vivir una vida plena e independiente y libre de violencia, misma que fue ratificada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, mediante decreto publicado apenas el 10 de enero de enero de este año.
Cabe destacar que la defensa no hizo referencia sobre la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores, adoptada Estados Unidos, el 15 de junio de 2015.
No obstante, el juez resaltó que López Obrador ratificó el tratado y lo incorporó al ordenamiento jurídico, mismo que desde enero se debe acatar en el país.
