La nave espacial Hakuto-R de la empresa japonesa ispace no ha logrado aterrizar con éxito en la superficie de la Luna, finalizando abruptamente su misión y las del rover emiratí Rashid y el pequeño robot Sora-Q de la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón, que iban con ella.
Hakuto-R estaba llamado a convertirse en el primer vehículo comercial en la superficie de la Luna. (El módulo lunar Beresheet, desarrollado por la organización israelí SpaceIL, también ostentó ese título antes de estrellarse, pero con una importante inversión de la Agencia Espacial Israelí).
Hakuto-R debía aterrizar en el cráter Atlas, en el cuadrante noreste de la Luna, a las 16:40 UTC del martes. La nave japonesa orbitaba el satélite a 100 kilómetros de altitud cuando encendió sus motores para iniciar la maniobra de descenso. La nave debía encender nuevamente sus motores a 25 kilómetros del suelo para frenarse y colocarse en vertical.
Según un comunicado de ispace, el módulo de aterrizaje estaba en posición vertical cuando realizaba su aproximación final a la superficie de la Luna, pero el control de misión no recibió datos que indicaran un alunizaje suave. Los ingenieros comprobaron que quedaba poco propelente en la nave, y que la velocidad de descenso aumentó rápidamente antes de que se perdieran las comunicaciones, por lo que “existe una alta probabilidad de que el aterrizador haya realizado un alunizaje brusco”.
ispace investigará los datos de telemetría adquiridos hasta el final de la secuencia de aterrizaje para aclarar los detalles del incidente. La empresa considera que realizó con éxito ocho de los diez hitos de la misión, desde la integración de la nave, en la que participó la compañía francesa ArianeGroup, hasta las maniobras de inserción en órbita lunar.
“Hemos logrado lo importante de esta misión adquiriendo una gran cantidad de datos y experiencia al ejecutar la fase de alunizaje. Lo importante es transmitir este conocimiento y aprendizaje a Mission 2 y más allá para que podamos aprovechar al máximo esta experiencia”, dijo Takeshi Hakamada, fundador y director ejecutivo de ispace, durante una retransmisión en directo.
Entre otras imágenes, la nave nos dejó una foto para el recuerdo: un eclipse solar sobre Australia visto desde la Luna. La Luna estaba alineada entre el Sol y la Tierra cuando Hakuto-R orbitaba el satélite a 100 kilómetros de la superficie, de manera que proyectaba una sombra visible sobre Australia.
ispace tiene previsto el lanzamiento de la misión M2 para 2024. Consiste en un aterrizador similar a Hakuto-R, pero con un rover diseñado internamente. La misión M3 está programada para 2025 dentro del programa CLPS de la NASA, que concedió a Team Draper (un grupo de empresas que incluye a la filial estadounidense de ispace) 73 millones de dólares para llevar cargas a la Luna.
Tal vez una de las sondas que orbitan la Luna logre tomar imágenes de la nave para aclarar qué le sucedió, pero el fracaso de Hakuto-R recuerda a las misiones Beresheet de Israel y Chandrayaan 2 de la India. Estos fracaso demuestran lo difícil que es llegar a la superficie de la Luna, y ponen en perspectiva las misiones Apolo de la NASA o las recientes misiones Chang’e de China, que ha alunizado tres veces con éxito.