Erika Jiménez, habitante del inmueble de tres niveles, señala que desde el temblor del 2017 se registraron fracturas de trabe de carga, situación que empeoró por el sismo del lunes.
Con el sismo de 6.9 grados que ocurrió la madrugada de este jueves, nuevamente se movieron los puntales que sostienen la trabe fracturada del inmueble de Filipinas 178 colonia Nápoles, alcaldía Benito Juárez.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Erika Jiménez habitante del inmueble de tres niveles aseguró que fue “otro sismo de miedo”.
“Estamos bien gracias a Dios, solo se movieron unos puntales. Ya vinieron anoche a revisar y ya me llamaron que durante el día vienen a acomodarlos”, indicó.
Cómo reporto este diario, Erika, su esposo y su hijo viven con la angustia y temor de que los 15 puntales que sostienen su departamento y tres niveles de pisos que conforman su edificio fallen y colapsan ya que desde 2017, se registró fracturas de trabe de carga, situación que empeoró a raíz del movimiento de este lunes, donde se elevó el número de grietas y daños en acabados.
Los desperfectos se registraron desde el sismo de 2017, sin embargo, el gobierno de la Ciudad de México no incluyó el inmueble ubicado en Filipinas 178 colonia Nápoles, alcaldía Benito Juárez, como prioritario, ya que los daños registrados no fueron catalogados como estructurales, por lo que Erika y los casi 40 vecinos que habitan el edificio se organizaron, efectuaron estudios y colocaron los 15 puntales que sirven para sostener las trabes que son la base de los 3 niveles del edificio, donde su departamento se sitúa justo en el primer piso.
A raíz del sismo de este lunes de 7.7 el edificio pasó a riesgo medio.
Erika comentó que ya está recibiendo atención pronto del Gobierno de la Ciudad de México.
