En Mexzombies retratan el ataque de un grupo de muertos vivientes donde los personajes se devoran a sí mismos, con la participación especial de las momias.
Era algo inevitable que tarde o temprano los zombies llegarían a México. Hay descarnados que atacan cualquier cosa con movimiento; los hambrientos que se devoran a sí mismos y los muertos vivientes que en cuerpos deshidratados han decidido invadir calles, colonias y ciudades.
En los últimos meses, y aprovechando la pandemia de Covid-19 que sacudió al mundo, estos seres planearon su salida masiva a través de tres producciones, las cuales han causado destrozos en cada uno de los sitios donde se han parado.
Mexzombies. será la primera en ver la luz por medio de streaming ViX+ el próximo día 26. Requirió de hasta 200 extras que dan vida a estos entes que algunos pensarían que salieron del infierno, pero en realidad su origen es algo que puede estar pasando justo a su lado. La historia dirigida por Chava Cartas, realizador de Mirreyes vs Godínez y la de terror Los inquilinos, inicia cuando el papá de un joven muere en Halloween, pero en realidad ya está infectado y va contagiando a todos del virus.
El dato. “Toda la historia sucede en un día y es ir viendo cómo van avanzando. El proceso de maquillaje era de 14 horas. La verdad es que hacer todo eso, con gente que supuestamente está muerta es muy divertido, porque aparte es una comedia”, comenta Cartas. Los zombis cayeron en manos del especialista Alfredo Mora (Cinco de mayo: la batalla y Luis Miguel: la serie), quien junto con el director quedó en que habría dos tipos de maquillaje: el recién convertido y el que ya lleva un poco de más tiempo. Y claro, una que otra cabeza arrancada. Iñaki Godoy, Daniel Tovar, Alejandro Puente, Roberta Damián y Bárbara de Regil forman parte del elenco que se trasladó a Durango para ejecutar lo escrito en el guión. “Mi personaje es un chico común y corriente, al que le gusta el parkour, le gusta una chica y a quien de pronto le toca tomar la responsabilidad de tener que salvar a México de un apocalipsis”, revela Iñaki. “Nos enseñaron a usar armas, yo tenía entonces 15 años y había compañeros más chicos a los que veían usando rifles, era también aprender a conducir para poder combatirlos. A veces abría los ojos, veía a los zombis y me preguntaba qué hacía ahí”, recuerda divertido el aún adolescente actor.
Otros invasores. Paciente cero, de Leopoldo Laborde, se filmó a finales del año pasado en las cercanías de la Ciudad de México, en una zona que debía aparentar una zona desértica. Todo inicia con una persona que comienza a presentar un extraño virus y los científicos no logran controlarlo, lo que desata el inicio de una hecatombe. “De pronto comienzan a comerse sus manos, sus piernas y así. Al principio pensé que el guión era una historia de infectados, pero va dando un giro a todo”, comenta Laborde, quien decidió llevar a la pantalla lo escrito por Fabián Archondo. Carlo Guerra y Florencio Ríos, así como algunas locaciones en Puebla, integran el proyecto producido por Olympusat y Utopía Siete Films. El tercer proyecto con muertos que caminan es Pinches momias, de Santiago Limón, una serie que acaba de concluir grabaciones, y que tuvo como sus personajes principales a esos seres famosos de la entidad.
