ENCUADRES... UN OJO PARA ASPIRANTES Y OTRO EN AMLO
Tras la marcha o contramarcha que encabezó el pasado domingo 27 de noviembre y que varias voces calificaron como de fuerzas contra fuerzas, Andrés Manuel López Obrador llegó oficialmente el 1 de diciembre a sus cuatro años completos como presidente de México.
Expertos consideran que lo que viene ahora para AMLO será una etapa en la que seguirá cobrando protagonismo y conducirá la sucesión presidencial de su partido y hasta de la oposición.
En Ciencia Política, cuando llegan los meses finales de un presidente, a ese proceso se le llama el fenómeno del "pato que cojea", el cual ocurre cuando los mandatarios ya van de salida y no se pueden reelegir, y ya nadie les hace caso porque todos están viendo a futuro cómo moverse, una situación que no está pasando necesariamente ahora con Andrés Manuel López Obrador.
Si bien el margen de acción del morenista se restringe, según el calendario electoral, prácticamente a un año, el escenario indica que ese periodo bastará para aprovechar su arrastre entre el electorado para las presidenciales de 2024.
Una ventaja para AMLO, según el experto en Ciencia Política por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Gustavo Martínez Valdés, es que a diferencia de otros gobiernos como el del panista Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) y el del priista Enrique Peña Nieto (2012-2018), que llegaron a sus últimos años perdiendo protagonismo por el desgaste, el morenista puede presumir “buenos números de aprobación, (pues) anda por el 65 % de aprobación y eso le da mucha presencia".
Además, el académico destacó la conferencia mañanera diaria del presidente, que "sigue siendo una estrategia de comunicación muy eficiente (...) y que mantiene a los medios discutiendo y delineando la agenda".
Javier Oliva, profesor-investigador en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, concuerda también que el protagonismo será la moneda de cambio en el último tercio de la administración de López Obrador.
Sin embargo, ambos académicos coinciden en que, aunque desde el primer día de su gobierno, el presidente ha trabajado "16 horas al día" y ha cumplido, según sus propios dichos, casi la totalidad de los 100 compromisos que entabló, "se va con todos los pendientes", pues temas como la pobreza, la desigualdad, la inseguridad y la delincuencia no se han solucionado y "están casi en los mismos niveles" de cómo los recibió.
A la par, aunque es espacio para otra columna el que pareciera que están definidas las apuestas de Morena para los próximos procesos electorales de 2023 y 2024, al menos mediáticamente las divisiones no son ajenas, principalmente por las reacciones del legislador Ricardo Monreal Ávila, a quien los mismos guindas le han pedido definirse ya.
A su usanza, AMLO ha prometido respeto a las respectivas sucesiones locales y la nacional, pero para un partido donde su figura sigue siendo hegemónica, es innegable que cada paso que el presidente dé, será determinante.
Y con la capacidad del morenista de definir incluso los pasos que dará la oposición, AMLO parece estar tan presente en cada fase del futuro que viene que, como dice el dicho, hay que estar con un ojo en los aspirantes y con otro en el presidente. ¿O usted qué opina?
Únete al canal de difusión de WhatsApp de El Tiempo MX y recibe las noticias más importantes de Monclova, Coahuila y México directamente en tu celular. ¡Haz clic y súmate ahora!
Noticias del tema