MÉXICO, 26 jul.
Si pensamos en películas de gangsters, inmediatamente la memoria nos remite a la cara de Paul Sorvino, conocido por su papel en Goodfellas, o al del sargento de la policía de Nueva York Phil Cerretta en ”Law & Order”, quien a los 83 años se despidio de la vida ayer, noticia que compartio su hija Mira Sorvino.
Sorvino nació en Brooklyn en 1939 y debutó en Broadway en 1964 en ”Bajour” y seis años después incursionó en el cine, en ”Where’s Poppa?” de Carl Reiner. En sus más de 50 años de trayectoria, Sorvino fue un pilar en el cine y la televisión. Interpretó a un comunista ítalo-estadounidense en ”Reds” de Warren Beatty, a Henry Kissinger en ”Nixon” de Oliver Stone y al jefe de la mafia Eddie Valentine en ”The Rocketeer”.
En la década de 1970, actuó junto a Al Pacino en ”The Panic in Needle Park” y con James Caan en ”The Gambler”, y volvió a hacer equipo con Reiner en ”Oh, God!”, además de formar parte del elenco de la comedia de asaltabancos ”The Brink’s Job” de William Friedkin.
Sorvino tuvo tres hijos de su primer matrimonio, incluyendo a la actriz ganadora del Premio de la Academia Mira Sorvino. Era un padre orgulloso de su hija y gritó de alegría cuando ganó el Oscar a mejor actriz de reparto por ”Mighty Aphrodite” en 1996.
Fue especialmente prolífico en la década de 1990, que comenzó interpretando a Lips en “Dick Tracy” de Beatty y Paul Cicero en “Goodfellas” de Martin Scorsese, en la que su personaje estaba basado en el mafioso de la vida real Paul Vario, y en 31 episodios de “Law & Order” de Dick Wolf. A esto siguieron papeles en “The Rocketeer”, “The Firm”, “Nixon” (que le valió una nominación al Premio SAG del Sindicato de Actores de la Pantalla) y “Romeo + Juliet” de Baz Luhrmann como el padre de Julieta, Fulgencio Capuleto.
A menudo decía que, “La realidad es que soy un escultor, un pintor, un autor popular, muchas, muchas cosas un poeta, un cantante de ópera, pero nada de gánster... Sería bueno que mi legado fuera algo más que un tipo rudo”.
