De qué sirve confesarme si no me arrepiento... Los domingos

La depresión no es un estado de ánimo, es una enfermedad que sí tiene cura.

Que tendrán los domingos, se desbordan nostalgias y se afloran los sentidos y emociones. No sé si se ha dado cuenta que muchas de las tragedias, sobre todo los suicidios se presentan los domingos, como ayer que un hombre intentó acabar con la vida de su ex mujer, luego él se quitó la vida.

Según cifras de la Fiscalía, un suicidio por semana se registró en el 2021, una cantidad bastante fuerte. Lejos de los números, es imposible no pensar lo desgarrada que queda la familia y los amigos con estas noticias tan terribles, de las que todos quisiéramos estar exentos.

Hoy amable lector, lo invito a cavilar, si es probable que alguno de nuestros amigos, familiares, compañeros de trabajo, estén pasando por una situación que los lleve a pensar que quitarse la vida es la salida.

Claro, usted va a decir, no es mi responsabilidad; pero no me diga que no siente bonito y se le alegra el día cuando alguien le hace un alago, lo escucha o lo contempla para algún proyecto. Un gesto de amabilidad puede cambiar el pensamiento negro de una persona y todos valemos absolutamente demasiado para saber que para todo hay solución, como diría “guelita” si se puede arreglar, pa´que te estresas y si no, pa´que te estresas.

Pero le recuerdo, que la depresión no es un estado de ánimo, es una enfermedad que sí tiene cura y que muchos no lo saben, nuestro cerebro querido lector, es un órgano más de nuestro cuerpo, como el corazón, el hígado, el riñón –que espero no los haya dañado mucho este fin de semana, no abuse-. 

Bueno a lo que voy, es que las sustancias que segrega el cerebro a veces no se dan, porque se necesita una ayudadita, y todos merecemos la pena saberlo. Es que esto es una rueda de la fortuna, a veces estamos bien y arriba y otras, (aquí abajo) diría Nodal, que por cierto que feo caso, pero que bonita canción sacó. Le digo, que pasa una mosca y le veo hasta las patitas frotarse, todo me distrae, UNA DISCULPA.

Bueno, el punto es que abusados, con las caras felices de manera permanente, esa es la mejor máscara de la depresión, la vida no siempre es pura felicidad, como todo ser humano, tenemos buenos y malos momentos; pero quien está lo suficientemente mal y deprimido, no quiere que nadie lo sepa, por eso un consejo, un buen comentario, una sonrisa nada nos cuesta, nunca está demás. 

Si es conocido, familiar, allegado de una persona que decidió quitarse la vida, sabe de lo que le estoy hablando solo el que carga la mochila sabe lo que trae adentro, menos juzgar y más empatía que de ser amable nadie se muere.

Si a usted los domingos le da por deprimirse, recuerde que tiene más de diez razones para seguir viviendo, esto no es una competencia, no se desgaste por ser un uno para todo y para siempre; ser un cuatro está bien padre, no está mal.

Pedir ayuda no está mal, aceptarla tampoco a veces de plano no podemos y es bonito sentir que alguien nos resetea el cerebro, el corazón y las ganas de echarle el doble de ganas.

Espero que tenga una bonita, fructífera, saludable y amorosa semana, Dios me los bendiga. Recuerden que nada es imposible, solo a veces cuesta un poco más.

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