Se ha comenzado a celebrar el carnaval entre cuidados por la pandemia junto a algunas restricciones como los límites en la participación en corsos y desfiles folclóricos.
La Paz.- El Ministerio de Salud de Bolivia informó en su último reporte sobre la situación de la pandemia sobre 467 nuevos casos y 5 fallecimientos por la COVID-19 tras la desescalada de la cuarta ola en el país.
Santa Cruz (235), La Paz (110) y Cochabamba (65) fueron los departamentos que presentaron más casos, mientras que en las demás 6 regiones bolivianas los contagios variaron entre 0 a 26.
También se reportó que 1,606 personas se recuperaron de la enfermedad.
Con estos registros, Bolivia acumula 21,372 decesos y 889,511 casos confirmados desde la llegada de la pandemia en marzo de 2020, mientras que 100,973 pacientes mantienen activa la COVID-19.
Bolivia pasa por la desescalada del reciente cuarto pico de contagios que tuvo su momento más crítico a fines de diciembre y principios de enero con jornadas en las que los casos superaron los 14,000.
La vacunación que comenzó hace un año consiguió que se apliquen 12,430.558 vacunas entre primeras, segundas y terceras dosis además de inmunizantes con componente único a mayores de 5 años que conforman una población vacunable de 10.2 millones.
El detalle establece que se emplearon 5,883.476 primeras dosis, 4,539.858 de la segunda, 1,012.263 inmunizantes de refuerzo o terceras aplicaciones y 994,961 componentes únicos.
La inmunización tuvo sus mejores resultados en las primeras semanas de enero cuando estaba vigente la exigencia del carné de vacunación como requisito para la realización de trámites e ingreso a sitios públicos y privados.
La medida fue suspendida por el Gobierno debido a las protestas de grupos antivacunas pertenecientes a sectores sociales afines.
El Ministerio de Salud ha pedido que gobernaciones y municipios alienten a que se mantengan las medidas de bioseguridad para evitar una posible nueva escalada de contagios durante el carnaval.
En varias regiones de Bolivia se ha comenzado a celebrar el carnaval entre cuidados por la pandemia junto a algunas restricciones como los límites en la participación en corsos y desfiles folclóricos.
