La entidad de protección civil aseguró que ha mantenido coordinación con autoridades locales y emitió "la recomendación para evacuar de llegar a ser necesario, para a ubicarse en puntos de seguridad"
Guatemala,- El volcán Pacaya incrementó este viernes su actividad con dos pulsos y la emisión de "gruesas columnas de ceniza" a 500 metros sobre el cráter y que se han dispersado a unos 8 kilómetros hacia el sur, según registros oficiales.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) recomendó cerrar el parque nacional donde se encuentra el volcán "por la tendencia (del coloso) a mantener esta actividad y para evitar que las personas estén en condición de peligro", como indicó el portavoz de la entidad, David de León.
También instó a la población a "no realizar ningún tipo de excursión debido a esta alta actividad", que constó de "dos pulsos que presentó esta mañana a las 05:00 y 11:00 hora local (11.00 y 17.00 GMT)", además de "un nuevo flujo de lava".
El Pacaya, un estrato volcán compuesto de 2,552 metros sobre el nivel del mar, "también registró la emisión de una gruesa columna de ceniza en dirección sur, visibles en algunas comunidades aledañas, como Los Ositos y otras fincas", agregó De León.
La entidad de protección civil aseguró que ha mantenido coordinación con autoridades locales y emitió "la recomendación para evacuar de llegar a ser necesario, para a ubicarse en puntos de seguridad", además de indicarle a la población a "estar atenta" a nuevas informaciones en relación a la actividad de dicho volcán.
Ubicado 60 kilómetros al sur de Ciudad de Guatemala, el Pacaya es uno de los 3 volcanes más activos de los 32 que tiene el país centroamericano.
Los otros son el de Fuego, que se ubica entre los departamentos de Guatemala, Escuintla y Chimaltenango, y el Santiaguito, que está en Quetzaltenango (oeste).
Las autoridades de protección civil en Guatemala habían advertido de un aumento de actividad del volcán Pacaya el pasado 1 de enero y también en octubre y noviembre de 2020 y consideran que se encuentra dentro del rango de una posible fase eruptiva, como la que manifestó en mayo de 2010.
