Denuncian a comandante y médico por torturas y muerte en dictadura brasileña
La investigación le acusó de ser la persona que, al percibir que De Andrade "no sobreviviría por mucho tiempo".
Sao Paulo.- La Fiscalía de Brasil anunció este martes que presentó una denuncia contra un antiguo comandante militar y un médico por su implicación en las "intensas sesiones de tortura" que provocaron la muerte de un militante comunista en 1975, en plena dictadura militar (1964-1985)
El caso se refiere al homicidio de José Maximino de Andrade, en la época que fue miembro del Partido Comunista Brasileña (PCB) y quien falleció a los 62 años por un "infarto de miocardio", "provocado" por las "torturas" a las que fue sometido, según el Ministerio Público de Sao Paulo.
Según la institución, De Andrade fue "retirado de su casa", en la ciudad de Campinas, a unos 100 kilómetros de Sao Paulo, adonde fue llevado por "agentes de la represión" sin que sobre él pesara una orden de prisión.
Allí fue "interrogado y torturado" bajo las órdenes de Audir Santos Maciel, entonces comandante del Departamento de Operaciones de Informaciones (DOI), un organismo considerado como uno de los más activos centros de persecución política, tortura y muerte durante el régimen militar.
Por su parte, el médico Harry Shibata era el responsable por "evaluar el estado de salud de los presos y dar aval para que continuaran las torturas".
En este contexto, la investigación le acusó de ser la persona que, al percibir que De Andrade "no sobreviviría por mucho tiempo", mandó que le retiraran del local y fuera abandonado delante de su casa, el 18 de agosto de 1975.
Ese mismo día, su estado de salud empeoró, fue hospitalizado y falleció "en razón de los malos tratos infligidos", según la Fiscalía, que señaló además que a su entierro acudió un "sargento del Ejército" para "obtener informaciones sobre otros integrantes del PCB".
A pesar de que se posicionó contra la lucha armada, el PCB fue un objetivo de los gerifaltes de la dictadura brasileña y sus integrantes fueron "perseguidos" en el marco de la "Operación Radar".
Esa operación, que en Sao Paulo era comandada por Santos Maciel, se desarrolló en Brasil entre 1973 y 1976 y resultó en la muerte de 11 miembros del Comité Central del PCB y la prisión de 679 afiliados, según datos oficiales.
Santos Maciel y Shibata han sido denunciados ahora por "homicidio doblemente cualificado", al ser realizado por motivos de persecución política, con uso de tortura.
La Fiscalía solicitó a la Justicia que los acusados también pierdan sus "cargos públicos" y se les cancelen sus pensiones.
Para el fiscal Andrey Borges, autor de la querella, los hechos descritos se enmarcan dentro de "crímenes contra la humanidad" y, por tanto, "son imprescriptibles e impasibles de amnistía".
Según un informe elaborado por una Comisión de la Verdad que fue presentado en 2014 e investigó las violaciones de derechos humanos cometidas bajo el régimen militar, la última dictadura brasileña dejó 434 muertos y desaparecidos por motivos políticos y miles de casos de tortura.
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