Análisis a tiempo... ¿En quiebra?
A nivel nacional se dio a conocer un presunto análisis que hace la empresa de Altos Hornos de México para declararse en quiebra en el vecino país de los Estados Unidos, medios nacionales e internacionales inmediatamente publicaron estas supuestas intenciones destacando que la empresa siderúrgica de Monclova explora el recurso del uso de protección del capítulo 11 para tratar de rechazar acuerdos de liquidación que firmó su presidente del consejo y accionista mayoritario Alonso Ancira, de quien señalan que lo hace para resolver las acusaciones de soborno que lo involucraron con Pemex.
De acuerdo al capitulo 11 al que presuntamente se apegó Altos Hornos le permite que venda una parte o simplemente la totalidad del negocio o empresa, lo que tanto se ha manejado desde que Altos Hornos comenzó a tener problemas económicos y se vino a bajo su producción.
Y es que la acerera monclovense ha registrado pérdidas de 2 mil 200 millones de pesos tan solo en el año del 2019, y para el año 2020 presuntamente se registra una pérdida de 2 mil 900 millones de pesos y para este año todos fuimos testigos del fuerte recorte que se hizo en la producción de acero ante la falta de inversión y del costoso mantenimiento de equipos.
Si de evadir se trata, cualquiera puede pensar primeramente en la quiebra para evitar los acuerdos que se hacen, como en este en este caso, lo que firmó Ancira con Pemex el pasado mes de abril para resolver los cargos penales sobre el supuesto soborno a ejecutivos de la petrolera para que se pagara mucho más por una empresa en el pasado 2014, una historia por demás contada.
La misma gata pero...
No pudo faltar la respuesta inmediata de la empresa y lo hizo a través de un boletín donde reconoció que analizan la exploración de dicha quiebra pero con la subsidiaria Minera del Norte S.A. de C.V.
Obviamente otra empresa que al igual que AHMSA pertenece a al Grupo Acerero del Norte (GAN) y que se encuentra en peores condiciones de Altos Hornos y explican que esto se debe a que un tercio de sus operaciones mineras para la producción de 6.6 millones de toneladas anuales de carbón térmico se desarrollaban en la Unión Americana y se paralizaron a partir de la cancelación por la Comisión Federal de Electricidad de los pedidos y contratos de abastecimiento para sus centrales, lo que llevó a la pérdida de 4 mil empleos directos.
Dicen que de los males el menor y le podría funciona el sacrificio. Era casi imposible que pusiera en la mesa a la empresa acerera ya que está en los planes de los directivos el esfuerzo para intentar levantar de la lona a la siderúrgica local que mira casi imposible la recuperación a menos de que suceda un milagro de inyección por cientos de millones de pesos.
Los que conocen del tema saben que es algo prácticamente imposible que revivan ese monstruo de acero sin meterle recurso alguno. Es cierto que el acero tiene el mejor precio de venta en su historia y lo están aprovechando al elevar el tonelaje de producción, pero desafortunadamente no será suficiente y los números son claros y fríos.
Además no se puede dejar de lado el tema de la deuda que tiene la empresa con los proveedores locales, quienes a pesar de su desesperación y de exigir a los cuatro vientos el pago, AHMSA les sigue debiendo más de mil millones de pesos, situación que los mantiene en el filo de la barda econóimica.
Lo ideal sería que se diera ese paso de venta en las acciones mayoritarias que pertenecen a la familia Ancira y de las cuales aún hay interés por inversionistas como Julio Villarreal de Villacero, que a decir verdad para muchos sería lo ideal, pero para otros pudiera ser de perjuicio tomando en cuenta de que afectaría algunos intereses, por supuesto internos y que los mantiene viviendo de vicios que por años han existido.
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