REDACCIÓN/EL TIEMPOEl herido juró venganza por la agresión.
"Hoy perdí, pero las cosas no se van a quedar así", argumentó un lesionado quien señalaba que se vengaría de seis tipos que irrumpieron la tranquilidad de su hogar, para darle de batazos a él y a su padre.
El afectado dijo también que a los agresores los conoce de vista, son miembros del sindicato minero, pero no se explica porqué llegaron y lo golpearon a él, luego remataron con su padre.
Omar Moreno Zapata de 39 años de edad, además de su padre Mateo Moreno Reyes de 55, ambos con domicilio en la calle 22 en la colonia Ramos Arizpe, quedaron bastante golpeados después de esta violenta acción, a manos de presuntos sindicalizados.
Moreno Zapata explicó que se encontraba ingiriendo bebidas embriagantes en la tranquilidad de su casa, pero antes de las 2:00 horas, llegaron unos tipos armados con bates, sin perder tiempo le empezaron a dar de golpes en todo el cuerpo.
Aunque se quiso cubrir con su brazo derecho, le dieron un batazo y sufrió de una probable fractura del antebrazo para después recibir varios golpes en la cabeza.
Cuando era atacado, su padre, el señor Mateo, quiso auxiliarlo pero también fue atacado, la persona adulta quedó con una fuerte herida en su cabeza.
Después de los violentos hechos los inculpados emprendieron la huida, y aunque elementos de Seguridad Pública habían logrado la detención de tres personas, al final salió a relucir que no habían participado en la reyerta.
Antes del arribo de una ambulancia de Cruz Roja, Mateo Moreno, al encontrarse sentado en una banqueta y siendo auxiliado por una oficial, juraba venganza, pues por poco lo matan.
"Ahorita voy para que me alivianen al hospital, pero ya mañana, las cosas serán distintas", argumentaba el herido.
Minutos después el personal de socorro hizo acto de presencia para atender a padre e hijo, luego fueron transferidos hacia un nosocomio.
