AGENCIAS/EL TIEMPO
El expresidente estadounidense Barack Obama y su esposa, Michelle Obama , fundaron su propia empresa, Higher Ground Productions, para crear nuevo material audiovisual en diversos formatos. Y lo hizo con un auspicioso comienzo: tal como se venía rumoreando, llegaron a un acuerdo con Netflix para proveer a la compañía de streaming de series con y sin guion, documentales y reportajes.
"Esperamos cultivar y curar las voces talentosas, inspiradoras y creativas que son capaces de promover una mayor empatía y entendimiento entre los pueblos, y ayudarles a compartir sus historias con el mundo", dijo el exmandatario en el comunicado lanzado por Netflix para confirmar el acuerdo.
El anuncio dio lugar a todo tipo de especulaciones sobre el contenido que Higher Ground Productions generará, aunque una fuente cercana al matrimonio aseguró a Reuters que ellos podrían participar en algunos de los programas en pantalla. Eso sí: no se espera que la programación tenga una naturaleza partidista, siguiendo la prédica de Obama durante su mandato, cuando solía criticar el modo en que los canales de cable cubrían las noticias.
"Barack y yo siempre hemos creído en el poder de la narrativa para inspirarnos, para hacernos pensar diferente acerca del mundo a nuestro alrededor y ayudarnos a abrir nuestras mentes y corazones a otros", dijo Michelle Obama en el comunicado.
Por el momento, está claro que las primeras producciones de los Obama recién estarán disponibles en la plataforma a partir de 2019.
El expresidente participó en enero en el programa de David Letterman en Netflix, My Next Guest Needs No Introduction. Además, se dice que tiene una relación amistosa con Ted Sarandos, el director de contenido de Netflix, y que las conversaciones para meterse en la producción de contenido ya estaban en curso desde hace algún tiempo.
"Estamos increíblemente orgullosos de que hayan elegido a Netflix como la casa para sus formidables habilidades narrativas", dijo Sarandos.
Netflix tiene 125 millones de subscriptores en el mundo. La empresa siempre ha sido renuente a comentar cuánta gente ve su programación, pero claramente domina el mercado creciente de los servicios de streaming.