MARTIN SILVA/REPORTERO
Con gran interés la Iglesia y población católica de Monclova y los municipios de la Región Centro del Estado, al igual que la de todo el mundo, se preparan para participar en las diferentes actividades con las que se recuerda la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, esto es en la semana mayor de la cuaresma, conocida también como Semana Santa, que inicia el próximo domingo con el tradicional Domingo de Ramos.
El padre Gilberto Almaraz de la Rosa, párroco de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, explicó que con la sabiduría y experiencia que tiene la Iglesia, sabe que las personas que participan en las actividades más importantes de la Iglesia, como es la cuaresma, lo hacen con la finalidad de ser mejores seres humanos, de mejorar su forma de pensar y de ser.
Por ello recordó que la preparación se inicia con el tradicional miércoles de ceniza, después viene la preparación inmediata para lo principal, que es la Semana Santa y que inicia con el domingo de ramos, cuando en todas las comunidades del mundo se recuerda y se celebra la entrada de Jesús a Jerusalén, la Ciudad Santa y más importante porque desde aquel entonces era el único lugar en donde el Dios único y verdadero se manifestaba.
Agregó que lo que celebra la iglesia es que JESÚS ha venido de veras para ser Rey, para establecer una forma, un estilo de vida, que nos traiga la paz verdadera y para eso se requiere que todos los católicos y los que creen en JESÚS, que lo acepten como Rey.
Aclaró que el reinado de Jesús, no es como el reinado de los reyes mundanos que se imponen, que recurren a ejércitos y a violencia para hacerse respetar, en cambio el reinado de Jesús se parece más al reinado de las mamás en las familias, que se sacrifica por sus hijos y en reciprocidad estos las quieren y las aman.
El Padre Gilberto Almaraz, destacó que en el caso de Jesús, el aceptó el reinado cuando sabía que estaba cerca su crucifixión y su muerte, y recordó que en una ocasión dijo; “nadie ama más a sus amigos, que el que da la vida por ellos”.
“La crucifixión de Jesús, no fue algo que él no pudiera evitar, le dijo a Pedro, cuando este le dio un golpe con su espada a uno de los soldados que fueron a apresarlo, guarda la espada, si yo quisiera le pediría a mi padre que enviara una legión de ángeles y los pulverizaría”, comentó.
Agregó que Jesús aceptó morir predicando la justicia, defendiendo a los pobres, curando a los enfermos, luchando y expulsando a los demonios y con su muerte nos demuestra que en verdad DIOS padre nos ama, porque él es la mejor imagen humanizada de DIOS padre.
Dijo que Jesús nos demostró con su muerte que la misericordia de DIOS es infinita, pues murió pidiendo perdón para los que lo asesinaban.
Y luego expuso que durante los próximos días celebrarán los tres días más importantes y santos de la Cuaresma, lo que es la Semana Santa, la cual inicia con el Domingo de Ramos, y luego vienen los días más importantes como son jueves, viernes y sábado.
El Padre Gilberto Almaraz, destacó que a pesar de lo convulsionado del mundo en los últimos años por tantas ambiciones y violencia los católicos debemos atender lo que Jesús dijo, cuando expresó, “hagan esto en conmemoración mía”.
Es decir que cada año nos comprometamos a dar la vida por nuestros amigos, que pongamos en práctica sus enseñanzas como verdaderos discípulos, lo que traerá consecuencias grandísimas como el que triunfen el amor y la paz.
NECESARIO ACEPTAR EL CAMBIO
El Padre Gilberto Almaraz de la Rosa, recomendó que lo primero que hay que hacer en estos días previos de la Semana Santa, es apartar tiempo y llegar a esta, convencidos de que es necesario que para que haya un cambio a nivel familiar, Ciudad y nación debemos empezar por nosotros mismos, pedirle a DIOS que nos ayude a ver en que tenemos que cambiar.
“No vamos a cambiar totalmente, verdad, pero confiamos en que DIOS nos preste vida para ir cambiando poco a poco.
Hay un principio de los antiguos que dice que la naturaleza no procede por santos, entonces el cambiar, el mejorar es un proceso en donde tenemos que insistir en el cambio, darnos tiempo para leer, escuchar y practicar los evangelios, sobre todo en aquellos que se refieren a la pasión, muerte y resurrección de nuestro señor Jesucristo, dijo para terminar.