REDACCIÓN/EL TIEMPO
“Estoy muy agradecida con que hayan llevado a cabo el programa PERAJ, porque me han apoyado mucho y espero que siga existiendo muchas generaciones más”, fueron las palabras de agradecimiento de Alondra Armendáriz, alumna del programa PERAJ, durante la graduación de la generación 2016-2017.
En la ceremonia cívica que se llevó a cabo en las instalaciones de la Casa Meced estuvieron presentes autoridades como la Presidenta del DIF Monclova Licenciada Ana Patricia Esquivel, la directora del DIF Monclova Luz Pérez, la responsable del Programa PERAJ Haydee García, la directora general de la Universidad Vizcaya de Las Américas Ángeles Elizalde, la encargada de Servicios Becarios de la UANE Lucila Santos Coy así como regidores y directores presentes.
La Presidenta del DIF Monclova, en representación del Presidente Municipal Licenciado Gerardo García Castillo, comentó que la actual administración es el único ayuntamiento público a nivel mundial en adoptar el programa PERAJ, el cual ha ayudado a miles de estudiantes a potenciar su desarrollo académico y social.
“Es de gran importancia dejar generaciones bien preparadas para que sean ciudadanos prósperos por eso la actual administración decidió llevar a cabo en coordinación con la Universidad Vizcaya de las Américas, la Universidad Autónoma del Noreste, la Universidad Metropolitana de Coahuila y el CEUC decidimos llevarlo a cabo”, declaró.
Además aprovechó para hacer la petición al cabildo presente de establecer el programa de manera institucional para que las próximas administraciones continúen con esta honorable labor.
Esta tercera generación tuvo un total de 17 graduados de diversas escuelas primarias quienes fueron incorporados al programa a través del cual estudiantes universitarios en servicio social, los atienden una vez por semana para ayudarles con la regularización de sus clases.
Por parte de los tutores universitarios David Jiménez comentó que además de cubrir su servicio social, ellos se quedan con una grata experiencia a formar parte del programa. Agradeció a la actual administración, a las universidades y a los padres de familia. “El trabajar con niños nos deja una gran enseñanza, mucho más grande de la que nosotros podemos dejarle a ellos”, agregó.
El Programa busca que por medio de una relación significativa y personalizada entre el universitario y el niño se fortalezcan en el menor: su autoestima, sus habilidades sociales, sus hábitos de estudio y se amplíe su cultura general y sus horizontes. El joven universitario que funge como tutor se convierte en un modelo positivo a seguir para el amig@.