— Agencias 16/12/2025
El Centro Prodh critica la recomendación de la CNDH por la muerte de dos niñas a manos del Ejército. Señala omisiones graves.
El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh) calificó como los "efectos más lesivos y dolorosos" de la política de despliegue militar sin controles efectivos los casos de las niñas Leidy (7) y Alexa (11), muertas en mayo pasado por elementos del Ejército en Sinaloa. La ONG criticó la Recomendación 201VG/2025 de la CNDH, emitida este lunes, por ser omisa en analizar las implicaciones de la militarización y la falta de garantías de no repetición, así como por no investigar a fondo el intento inicial de encubrimiento.
Una recomendación que omite el contexto de militarización y repetición
En un comunicado, el Centro Prodh señaló que, si bien la CNDH emitió una recomendación que reconoce el uso indebido de la fuerza, el organismo que preside Rosario Piedra omitió un análisis profundo sobre las implicaciones de este caso en el marco de una política de seguridad que "ha perpetuado y profundizado el despliegue militar". También criticó que la Comisión no denunció la práctica de la Justicia Militar de abrir investigaciones paralelas que pueden obstaculizar la justicia civil.
El intento de encubrimiento y la versión del "fuego cruzado"
La ONG sostuvo que es "preocupante" que la CNDH no investigara a profundidad el intento inicial de encubrir los hechos difundiendo la versión de un "fuego cruzado", una narrativa utilizada frecuentemente en casos de uso arbitrario de la fuerza castrense para evitar la rendición de cuuntas. Este encubrimiento inicial nunca fue públicamente corregido por las autoridades, según el Centro Prodh.
Una familia marcada dos veces por la violencia militar
El caso tiene un antecedente trágico: la familia de las niñas ya había sido agraviada en 2008, cuando un integrante fue privado de la vida arbitrariamente por el Ejército, un caso que llegó a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). El Centro Prodh destacó que la recomendación de la CNDH hace referencia a este antecedente, pero no genera mecanismos sólidos para romper este ciclo de violencia e impunidad.
Llamado a un mensaje claro desde las más altas autoridades
La organización exigió que "desde las más altas autoridades se emita un mensaje claro" de que estos hechos constitutivos de graves violaciones a derechos humanos no deben repetirse. Subrayó que las familias continuarán denunciando y exigiendo justicia, no solo para Leidy y Alexa, sino para todas las víctimas de la militarización, una política que, según la ONG, se ha perpetuado a lo largo de diversas administraciones sin contrapesos institucionales efectivos.
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