— Daniela Cordova 04/12/2025
La Iglesia enfrenta desabasto de sacerdotes pese a esfuerzos de promoción vocacional.
La Diócesis de Saltillo reconoció que persiste un número insuficiente de sacerdotes para atender las necesidades pastorales de la comunidad católica, situación por la que han replanteado proyectos y reforzado acciones para promover nuevas vocaciones. El obispo Hilario González señaló que, aunque se cuenta con un presbiterio activo, la demanda continúa siendo mayor que la capacidad de atención.
El obispo refirió que cada parroquia trabaja con metas y propósitos particulares, pero admitió que el déficit de sacerdotes representa una limitante para emprender proyectos como la apertura de nuevas iglesias en la región Centro. Consideró que existen diagnósticos sobre zonas que requieren atención pastoral, pero actualmente no se cuenta con suficientes ministros ordenados para extender la estructura parroquial.
Presbiterio activo, pero con retos
En la diócesis se concentra un aproximado de 200 sacerdotes entre diocesanos y religiosos, sin embargo, no todos están en plenitud de actividad pastoral. González explicó que una parte del clero está en edad avanzada o jubilado, aunque continúan colaborando en funciones ministeriales. Esta realidad impacta en la capacidad operativa para atender comunidades, especialmente en municipios rurales y zonas en crecimiento.
Impulso a la vocación sacerdotal
Como respuesta, la Iglesia local ha fortalecido la promoción vocacional, con actividades constantes dirigidas a jóvenes. El obispo informó que el seminario realizará un retiro cercano a Navidad para quienes tengan inquietud o deseen conocer más sobre la vida sacerdotal. Además, se mantienen visitas a comunidades rurales y encuentros vocacionales que buscan motivar el discernimiento entre hombres y mujeres.
Aunque recientes actividades vocacionales han reunido a cientos de jóvenes, el reto radica en acompañar procesos y favorecer decisiones firmes. El obispo subrayó que existe interés, pero se requiere tiempo, acompañamiento y constancia para que ese interés se traduzca en vocaciones que fortalezcan a la diócesis en el futuro.
Déficit que supera la estadística
Al ser cuestionado sobre la cantidad de sacerdotes faltantes, el obispo declinó precisar una cifra, pero reconoció que la necesidad es amplia. Subrayó que la Iglesia continúa trabajando para sostener la vida pastoral, aunque el desabasto sigue siendo un desafío estructural que requiere oración, participación comunitaria y promoción vocacional permanente.
Con ello, la diócesis busca enfrentar un escenario que afecta directamente la atención a fieles y el crecimiento eclesial, en un contexto donde la demanda pastoral supera la disponibilidad de ministros.
Instala la nueva aplicación de El Tiempo MX