— Redacción El Tiempo 01/12/2025
La infertilidad masculina sigue siendo un tema poco discutido en México, a pesar de que está involucrada en cerca de la mitad de los casos en los que una pareja tiene dificultades para concebir.
Así lo explica la doctora Lourdes Flores, ginecóloga y obstetra, quien señala que los estereotipos de género y la falta de información continúan retrasando el acceso a un diagnóstico temprano.
Aunque la infertilidad afecta tanto a hombres como a mujeres, la especialista destaca que aún persiste la idea equivocada de que es un problema exclusivamente femenino.
Esta percepción, comenta, impide que muchos hombres busquen atención médica y se realicen estudios básicos como el espermatograma, fundamental para evaluar la cantidad, la movilidad y la forma de los espermatozoides.
La doctora Flores retoma datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que calcula que el 17.5% de los adultos experimenta algún grado de infertilidad, con participación masculina en al menos la mitad de los casos. No obstante, numerosos hombres evitan acudir al médico debido al estigma cultural y a las presiones relacionadas con la masculinidad.
Entre los mitos más extendidos sobre la fertilidad masculina, la especialista destaca la creencia de que el simple hecho de eyacular garantiza una buena salud reproductiva. También aclara que haber tenido hijos previamente no descarta la posibilidad de presentar problemas más adelante, ya que la calidad del esperma puede cambiar con el tiempo.
Factores como infecciones, obesidad, estrés, varicocele o exposición a sustancias tóxicas pueden afectar la fertilidad masculina, además del impacto natural del envejecimiento. Aunque los hombres producen espermatozoides durante toda su vida adulta, esto no asegura que mantengan siempre la misma calidad.
Flores advierte que cuando la evaluación médica se centra únicamente en la mujer, se corre el riesgo de prolongar tratamientos innecesarios, aumentar la frustración de la pareja y retrasar la detección de la causa real del problema. Por ello, la atención debe ser completa desde el inicio.
Para la especialista, romper el silencio alrededor de la fertilidad masculina es esencial. “Ser padre también implica cuidar la salud reproductiva. Hablar del tema abiertamente es clave para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados”, concluye.
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