El momento más difícil llegó para los familiares de Benjamín López Delgado, al sepultar a un gran hombre, padre y esposo ejemplar, un líder sindical que siempre fue un gran apoyo para sus compañeros en la planta de trabajo.
Con profundo dolor sus seres queridos le dieron la despedida a Benjamín, quien deja un gran vacío en el corazón de todos quienes formaron parte de su vida, pero llevarán su recuerdo grabado en el alma.
Junto con él, fue sepultada su amada esposa Damaris Sarahí Hernández Velázquez, la pareja de esposos prometieron amarse hasta que la muerte los separará, pero su amor seguirá perdurando aun en la eternidad.
Antes de llevarlos al sepulcro, se ofreció una misa de cuerpo presente en la parroquia San José Obrero de la colonia Obrera Norte, donde el sacerdote celebrante elevó sus oraciones por el eterno descanso de Benjamín y Damaris, sus hijos Said, Salim y Pamela.
Al término de la misa, el cortejo fúnebre se trasladó al panteón Jardines del Recuerdo en Estancias, para darles cristiana sepultura.
Aun sin concebir su partida, familiares lloraban con profundo dolor postrados al féretro de Benjamín y Damaris, quienes ya viven el descanso eterno.
La familia López Hernández siempre se mantuvo unida, se profesaban un gran amor; el pasado fin de semana murieron los cinco integrantes en un accidente en la carretera Saltillo.
Benjamín era el líder sindical de la empresa Inmagusa, donde laboro por 17 años; como padre y esposo fue un gran ejemplo al mantener unida a su familia, altruista y sensible a las causas nobles.