— Gilberto Ortiz 11/06/2025
De acuerdo con los habitantes del sector, el escurrimiento de aguas negras ha ido en aumento en los últimos días.
Vecinos de la colonia Los Olivos denunciaron el brote constante de aguas negras en el parque lineal ubicado en el cruce de la calle Rafael Talamantes y la avenida de Los Olivos, el cual lleva más de una semana sin ser atendido por las autoridades correspondientes. El problema se origina en el alcantarillado, donde las aguas residuales han comenzado a salir a la superficie, generando malos olores y condiciones insalubres para quienes habitan o transitan por la zona.
De acuerdo con los habitantes del sector, el escurrimiento de aguas negras ha ido en aumento en los últimos días. Incluso en uno de los puntos críticos del parque, la alcantarilla se destapó completamente, lo que provocó que desechos humanos procedentes de varios domicilios cercanos se derramaran a la vía pública. La situación ha generado incomodidad entre los colonos, quienes han limitado el uso del área verde y evitan permanecer en los alrededores.
El problema ha sido expuesto en diversas ocasiones tanto ante el Ayuntamiento como al Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (SIMAS), pero hasta el momento no se ha realizado ninguna intervención visible.
María José González, quien vive a escasos metros del parque, señaló: “Ya lleva más de una semana así y no vienen. Pedimos que lo verifiquen y que lo corrijan porque es de muy mal agrado eso. El olor se mete hasta las casas, y uno ni puede comer a gusto con todo el hedor”. La afectada comentó que incluso han tenido que cerrar ventanas y puertas a ciertas horas del día para evitar que los olores penetren al interior de sus viviendas.
La zona afectada es de uso común, especialmente durante las tardes y fines de semana, cuando varias familias acuden al parque para realizar caminatas, actividades deportivas o simplemente descansar. Sin embargo, el brote de aguas residuales ha limitado por completo estas actividades, debido a las condiciones insalubres generadas por la presencia de desechos visibles y el riesgo de enfermedades.
Según datos del sector salud, el contacto con aguas negras puede derivar en infecciones dérmicas, gastrointestinales y respiratorias, especialmente en menores de edad y personas mayores. Además, la acumulación de residuos orgánicos en áreas públicas fomenta la proliferación de moscas, mosquitos y otros vectores de enfermedades.
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