Dra. Corazón: Mi novio, mi buffet emocional

— Doctora Corazón 15/05/2025

Testimonio:

Tengo una relación de casi dos años con mi novio. Cuando lo conocí él tenía un peso normal, era delgado pero no tanto para ser considerado "flaco". Se ha metido al gimnasio desde entonces y ha aumentado de peso más de 20 kilos. Me gusta verlo comer. Me gusta más verlo engordar. Me gusta verlo gordito. Me encanta su panza. Incluso creo que me atrae más sexualmente.

No puedo evitar pensar en darle de comer todo lo que está a mi alcance, incluso no me molesta darle todo mi almuerzo si así puedo verlo comer y subir de peso. Me parece curioso que me guste porque personalmente no me gusta comer tanto, ni subir de peso, pero... Me encanta que él sí. No puedo evitar besarlo incluso mientras come, he fantaseado con el pesando más y más. Mi mayor ilusión es verlo pesando mucho más de lo que ya lo hace. Me pone triste y me deprime pensar que perderá algo del peso que ha ganado cuando empiece a definir.

¿Es normal que me encante tanto mi pareja mientras más come y más pesa?

Consejo:

A ver, no hay nada más romántico que alimentar a tu pareja como si fueras la nona italiana reencarnada con un fetiche gastronómico. Lo importante aquí es que su panza sea consentida… pero también consensuada. Si a él le gusta subir de peso y tú disfrutas ver cómo desaparece tu comida en su boca con ojos de amor y deseo, ¡es un win-win bien sabroso! Solo recuerda que lo sexy no está peleado con la salud, así que si un día él decide cambiar el menú por proteína y cardio, ámalo igual… aunque extrañes ese muffin top que te robaba el aliento y el postre. 

🧐 Pregúntale a la Doctora Corazón

Instala la nueva aplicación de El Tiempo MX

ver en sitio completo: Dra. Corazón: Mi novio, mi buffet emocional