— Redacción El Tiempo 20/03/2025
La sal, aunque esencial en nuestras cocinas, puede convertirse en un riesgo para la salud si no moderamos su consumo.
A pesar de su capacidad para realzar el sabor de los alimentos, el abuso de la sal está vinculado a serios problemas de salud que van más allá de la hipertensión. Aquí te compartimos tres efectos ocultos del exceso de sal que podrían estar afectando tu cuerpo sin que lo sepas.
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Desbalancea la flora intestinal
El intestino, conocido como el "segundo cerebro", contiene miles de millones de bacterias que son clave para nuestra salud. Según la dietista Emily Leeming, un consumo elevado de sal puede reducir la cantidad de lactobacilos, bacterias beneficiosas para el cuerpo. Este desequilibrio microbiano no solo afecta la digestión, sino que también contribuye al aumento de la presión arterial, lo que pone en riesgo el sistema cardiovascular. -
Afecta el funcionamiento cerebral
El exceso de sal también impacta la salud cerebral. Investigaciones recientes sugieren que una dieta rica en sodio puede reducir los microbios intestinales que influyen en las funciones cognitivas, lo que podría ocasionar problemas de memoria y aprendizaje, destacando la conexión entre lo que comemos y la salud mental. -
Interfiere con la regulación del apetito
Un efecto menos conocido del exceso de sal es su influencia sobre la regulación del apetito. El consumo excesivo de sal puede inhibir la producción de la hormona GLP-1, que es responsable de generar la sensación de saciedad. Como resultado, las personas tienden a comer en exceso, lo que favorece el sobrepeso y la obesidad, además de aumentar los riesgos de hipertensión y enfermedades cardiovasculares.
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