— Sarah Zamora 23/02/2025
Siguiendo estos consejos, tus brochas se mantendrán limpias, y tu piel, radiante y saludable.
Tu piel merece lo mejor, y eso no solo significa usar buenos productos de skincare, sino también mantener una buena higiene en todo lo que entra en contacto con ella. ¿Sabías que unas brochas sucias pueden ser la causa de brotes de acné o irritaciones?
Para evitar estos problemas, te compartimos una guía sencilla sobre cómo limpiar tus brochas de maquillaje correctamente.
¿Por qué es tan importante limpiar tus brochas?
Con el uso diario, las brochas acumulan restos de maquillaje, grasa, suciedad y bacterias. Esto puede causar problemas en la piel, como acné o infecciones por hongos. Por eso, los dermatólogos recomiendan lavarlas cada 7 a 10 días.
Pero si usas productos líquidos (como base o corrector), lo ideal es limpiarlas diariamente. En cambio, las brochas para polvos pueden lavarse 1 o 2 veces por semana. Y las esponjas… ¡todos los días después de usarlas!
Paso a paso para una limpieza perfecta
- Enjuaga las cerdas con agua tibia (sin mojar el mango para que no se despegue con el tiempo).
- Aplica jabón para brochas o un champú suave y masajea en círculos sobre tu mano o un tapete limpiador.
- Enjuaga con agua tibia hasta que salga completamente limpia.
- Si aún quedan residuos, repite el paso 2.
- Exprime suavemente las cerdas para eliminar el exceso de agua.
- Presiona con una toalla de papel para absorber la humedad restante.
- Déjalas secar acostadas sobre una toalla limpia toda la noche.
Importante: Nunca seques las brochas con las cerdas hacia arriba, ya que el agua puede deslizarse al mango y dañarlas.
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