— José Luis Adriano
Los Bills aprovecharon los espacions y ganan a Ravens
Los errores terminaron con la temporada de Baltimore. El partido más esperado de los playoffs se definió en los segundos finales, con los Bills de Buffalo quedándose con el segundo boleto para la final de la Conferencia Americana.
La escuadra dirigida por Sean McDermott sufrió, pero supo ganar 27-25 a unos Ravens que se volvieron a quedar cortos en su intento por volver al Super Bowl. Ahora se repetirá el último gran clásico de la Conferencia, con Buffalo desafiando el próximo domingo a los Kansas City Chiefs.
Y el espectáculo no decepcionó. El segundo y tercero en la siembra de la AFC estuvieron a la altura, cada uno con sus fortalezas para intentar sacar la mejor parte.
Dentro de los posible, Bills no fue arrollado por el ataque terrestre de su rival. Derrick Henry poco daño pudo hacer durante la primera mitad, aunque en la segunda despertó e incluso logró un touchdown.
Ambos equipos consiguieron un touchdown durante la primera serie ofensiva, pero llegaron los primeros errores del partido. Ambos provinieron de la mano de Lamar Jackson. El MVP primero lanzó una intercepción y después fue víctima de un fumble, para que los locales sacaran ventaja de 11 puntos (21-10).
Para el complemento, Baltimore mostró otra versión. Henry empezó a mover las cadenas por tierra y Lamar hizo lo propio por la vía aérea, y así recortó la diferencia a sólo dos puntos antes de entrar al último cuarto.
Ravens buscaba la voltereta sobre los Bills
Josh Allen ya había perdido el ritmo. Pero la jugada clave del encuentro llegó en el error de Mark Andrews. El ala cerrada es uno de los mejores jugadores en la historia de los Ravens, y justo cuando su equipo se encaminaba para la voltereta, perdió el balón.
La defensiva visitante todavía le dio una última oportunidad a Lamar, Henry y el propio Andrews de mandar el juego a tiempo extra, pero volvió a fallar Andrews. Primer Lamar Jackson consiguió su segundo TD de la noche, con un envío a Isaiah Likely, aunque necesitaba la conversión de dos puntos para completar la obra.
Baltimore depositó su confianza de nueva cuenta en Andrews y para su mala suerte dejó caer un balón que parecía de rutina para un jugador de su calidad. La temporada del monarca de la división Norte de la AFC volvió a terminarse mucho antes de lo que se habían puesto como objetivo.