— José Gaytán
Durante su campaña y después de su elección, Trump ha emitido una serie de declaraciones que apuntan hacia un enfoque económico proteccionista.
El próximo lunes 20 de enero marca un evento trascendental para la economía mundial: la toma de protesta de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos. El líder republicano, cuyo ascenso al poder ha estado rodeado de polémicas y una retórica cargada de propuestas proteccionistas, genera preocupación entre inversionistas, mercados internacionales y gobiernos alrededor del mundo debido a las políticas económicas que podría implementar, generando mucha incertidumbre en los mercados bursátiles, ya que de acuerdo a cada una de sus declaraciones en el periodo de transición señala mayores aranceles y deportaciones masivas todo esto y más generan un clima de tensión ante el escenario que pudiera registrarse.
De acuerdo al economista Pedro Bustos, el tipo de cambo será una expectativa en el mercado financiero ya que de cumplir su promesa de incrementar los aranceles afectaría de manera directa a México ya que es el principal socio comercial, destacando lo disparado del tipo de cambio en la presente semana en el que esta a nada de llegar a los 21 pesos por lo que existe incertidumbre de como se comporte este lunes próximo que entre en funciones. En lo referente a las deportaciones masivas el experto en temas económicos, destacó que afectaría por la tema de las remesas que los mexicanos mandan de Estados Unidos a México ya que son millones lo que circula alrededor de este tema que inclusive lo comparan mayor a las ganancias de México por el petróleo.
Amenazas económicas y su impacto en el comercio global
Durante su campaña y después de su elección, Trump ha emitido una serie de declaraciones que apuntan hacia un enfoque económico proteccionista. Entre sus propuestas más destacadas se encuentran el aumento de aranceles a productos importados, la revisión o cancelación de acuerdos comerciales como el T-MEX y la imposición de impuestos más elevados a empresas que manufacturen en el extranjero. Estas amenazas han generado preocupación en diversas industrias, particularmente en aquellas dependientes del comercio internacional. Los mercados financieros han reaccionado con volatilidad en las últimas semanas, evidenciando la incertidumbre que existe sobre cómo estas políticas podrían afectar el flujo comercial global y las economías emergentes que dependen del intercambio con Estados Unidos.
Impacto en la frontera y el tipo de cambio
En regiones fronterizas, como la que conecta México y Estados Unidos, las expectativas han influido directamente en el tipo de cambio. En las últimas semanas, el peso mexicano ha mostrado una depreciación significativa frente al dólar, alcanzando niveles históricos de incertidumbre. Esto afecta no solo a los consumidores que dependen de importaciones, sino también a las empresas exportadoras que enfrentan un panorama incierto respecto al acceso al mercado estadounidense. Los pequeños y medianos empresarios en la frontera han mostrado inquietud sobre cómo las políticas de Trump podrían alterar los flujos comerciales y las cadenas de suministro, elementos clave en la economía regional.
El clima de incertidumbre no se limita a América del Norte. Los inversionistas internacionales están evaluando cuidadosamente dónde colocar su capital en un entorno donde la dirección económica de Estados Unidos aún no está clara. Aunque algunos sectores, como el energético y la infraestructura, podrían beneficiarse de las políticas del nuevo gobierno, la falta de un plan definido ha generado cautela en los mercados bursátiles y en los principales centros financieros del mundo. Países como China y México se perfilan como algunos de los más afectados por las políticas económicas anunciadas, pero la preocupación también abarca a la Unión Europea y otras economías desarrolladas que mantienen importantes relaciones comerciales con Estados Unidos.
A unas horas la toma de posesión, la comunidad internacional sigue expectante sobre cómo Donald Trump traducirá su retórica de campaña en acciones concretas de gobierno. Las decisiones que tome en los primeros días de su administración serán cruciales para delinear el rumbo económico global y podrían marcar un cambio significativo en el orden económico establecido. Mientras tanto, los mercados seguirán atentos a las señales que emita el nuevo gobierno, preparándose para ajustar sus estrategias a un escenario que promete ser, como mínimo, volátil.