— Sarah Zamora
A pesar de ser un militar, Sebastián era un cristiano devoto.
San Sebastián Mártir es uno de los santos más venerados en la Iglesia Católica, conocido por su valentía y su fe inquebrantable.
Vida
San Sebastián nació en Narbona (hoy Francia) hacia finales del siglo III. Se enlistó en el ejército romano, donde alcanzó el rango de capitán en la Guardia Pretoriana, la elite de la guardia imperial. A pesar de ser un militar, Sebastián era un cristiano devoto. Durante la persecución de cristianos bajo el emperador Diocleciano, se le descubrió como cristiano y fue arrestado.
Después de ser condenado a muerte, Sebastián fue atado a un árbol y golpeado con flechas hasta quedar aparentemente muerto. Sin embargo, logró sobrevivir milagrosamente a la ejecución. Tras su recuperación, regresó para confrontar al emperador, lo que le costó la vida, pues fue condenado nuevamente y finalmente martirizado por decapitación.
Obra
La vida de San Sebastián es un ejemplo de fe y resistencia. Su martirio y su testimonio de vida inspiraron a numerosos cristianos a mantenerse firmes en su fe a pesar de la persecución. Se le asocia con la protección contra la peste, y ha sido invocado a lo largo de los siglos por quienes sufren de enfermedades contagiosas. Es considerado un mártir valiente, que mantuvo su fe a pesar de los sufrimientos extremos.
Patrono
San Sebastián es el patrono de los soldados, los atletas y los arqueros, así como de las personas que padecen enfermedades contagiosas, especialmente la peste. Su festividad se celebra el 20 de enero en la Iglesia Católica.
A lo largo de la historia, la devoción a San Sebastián ha sido significativa, y su imagen, tradicionalmente representado con flechas clavadas en su cuerpo, se ha mantenido como un símbolo de resistencia y protección ante la adversidad.