Jiménez, tuvo que aportar los recursos necesarios para evitar que la institución incumpliera con sus compromisos con sus empleados.
La Universidad Autónoma de Coahuila (UAdeC) dejó en evidencia su precariedad financiera al reconocer que el gobernador, Manolo Jiménez Salinas, tuvo que aportar los recursos necesarios para evitar que la institución incumpliera con sus compromisos laborales.
Hace un mes, el rector de la UAdeC, Octavio Pimentel, reconoció que la institución se encontraba ante un déficit de 685 millones para hacer frente a esta obligación legal con el personal que durante años trabajó en la institución.
Recurso. A pesar de que en principio se indicó que la crisis era únicamente con el personal en retiro, según el boletín oficial emitido, los sindicalizados recibieron su aguinaldo el 13 de diciembre, antes del plazo estipulado por el contrato colectivo con el Sindicato de Trabajadores de la Universidad Autónoma de Coahuila (STUAC).
Acciones de austeridad. El resto de los empleados obtuvieron el recurso el 18 de diciembre, mientras que los pensionados fueron los últimos en obtenerlo el día 20.
Además, la universidad informó que implementó “acciones de austeridad y uso eficiente de los recursos”, y que gracias a ello pudo cumplir con sus obligaciones ante el IMSS e Infonavit.
Compromiso. El documento señala que el apoyo del gobernador es una muestra clara del compromiso del estado de Coahuila con la educación superior y con sus trabajadores.
Sin embargo, esta situación plantea una reflexión sobre la necesidad de implementar reformas estructurales en la administración financiera de la UAdeC para evitar futuras crisis.
El gobierno. La dependencia en aportaciones extraordinarias, como la realizada por el gobierno estatal, subraya la urgencia de establecer mecanismos que aseguren la sostenibilidad económica de la institución a largo plazo.