El nuevo premier francés es conocido por ser uno de los máximos expertos en la figura del rey Enrique IV de Navarra
El presidente francés, Emmanuel Macron, nombró este viernes 13 de diciembre como primer ministro a su aliado centrista y veterano político François Bayrou, de 73 años, con el reto de aglutinar una mayoría parlamentaria que impida su caída, anunció la presidencia.
Quien era el alcalde de Pau, una ciudad al suroeste de Francia, sucederá al conservador Michel Barnier, también de 73 años, que cayó el 4 de diciembre en una moción de censura en el Parlamento cuando intentaba aprobar los presupuestos para 2025.
¿Qué se sabe de François Bayrou, el nuevo primer ministro francés?
François Bayrou es conocido en Francia por ser uno de los máximos expertos en la figura del rey Enrique IV de Navarra, al que la leyenda atribuye la frase “París bien vale una misa”, que puso fin a las guerras de religión entre católicos y hugonotes que ensangrentaron el siglo XVI francés.
El nuevo primer ministro es un viejo conocido de la clase política. Su consagración en la política nacional llegó con su nombramiento en 1993 como ministro de Educación, en un gobierno de derecha durante la presidencia en Francia del socialista François Mitterrand, a quien apoyó en las presidenciales de 1995, lo que le valió alejarse del poder tras la victoria en las mismas de Jacques Chirac.
Desde entonces, encadenó los mandatos de diputado, eurodiputado, alcalde como líder de su formación centrista llamada Movimiento Demócrata (MoDem) desde 2007 y se presentó en 2002, 2007 y 2012 a la elección presidencial en Francia, sin éxito.
Para la elección de 2017 decidió apoyar a Macron, quien irrumpió desde el centro con un discurso reformista “ni izquierda ni de derecha”, y este le correspondió nombrándolo ministro de Justicia, cargo en el que sólo estuvo 34 días.
Una investigación judicial sobre la contratación fraudulenta de asistentes en el Parlamento Europeo lo forzó a dejar el cargo. En febrero de este año, la justicia condenó a MoDem pero absolvió a su fundador en nombre del “beneficio de la duda”.
Tres veces fue candidato a la presidencia, pero en Macron encontró la encarnación de su aspiración política, la de una figura que rompiera el mapa partidista del país, lo que le llevó a dar un paso atrás en sus propias ambiciones presidenciales y a convertirse, desde muy temprano, en uno de sus más fieles aliados del presidente.
Nacido cerca de Pau, cuna de su admirado monarca, y de donde fue alcalde. Ahora Bayrou tiene por delante una tarea tan titánica, la de reconciliar a tres campos que bloquean la vida política del país, lo que pondría una guinda esplendorosa a cuatro décadas de una carrera que ha discurrido en el ámbito local, en el Parlamento Europeo y en dos ministerios.