Es realmente preocupante que más de 3 millones de estadounidenses con asma no puedan permitirse tomar sus medicamentos según lo recetado. La encuesta publicada en la revista Thorax revela que alrededor del 18% de las personas con asma han tenido que renunciar a algún nivel de atención recomendada debido al alto costo de los medicamentos.
Esto no solo aumenta el riesgo de ataques de asma, sino también las visitas a la sala de emergencias relacionadas con el trastorno respiratorio. Aunque la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio y la expansión de Medicaid han ayudado a reducir este porcentaje desde 2011, todavía queda mucho por hacer1.
¿Qué opinas sobre la necesidad de más iniciativas gubernamentales para reducir el costo de los medicamentos para el asma?