El Milan se complicó la vida en Eslovaquia, pero logró obtener los tres puntos en un partido en el que la victoria era casi obligatoria. Aunque certifican prácticamente su clasificación, el rendimiento del equipo dejó mucho que desear.
El Slovan de Bratislava tuvo una de sus mejores oportunidades para puntuar en la Champions League, pero sus propios errores, que evidencian las limitaciones del equipo, impidieron una hazaña histórica.
Desde el inicio, ambos equipos mostraron sus intenciones. El Slovan, con una defensa extremadamente cerrada, buscó anular al Milan, que movía la pelota de lado a lado en busca de un hueco. A pesar de la intensidad defensiva, el Slovan estuvo cerca de sorprender al Milan con una clara ocasión al principio del partido, que la zaga italiana no logró resolver con seguridad. Pulisic salvó el gol en esa jugada, y al minuto siguiente fue el propio Pulisic quien se desmarcó y abrió el marcador para el Milan. Con 1-0, todo parecía encarrilado para los visitantes, pero su fragilidad defensiva permitió que el Slovan empatara rápidamente. Barseghyan, aprovechando un pase largo al espacio, definió con calma ante Maignan, lo que descolocó al Milan y les hizo perder el control del partido en los últimos minutos del primer tiempo.
En la segunda mitad, el Milan reaccionó gracias a la entrada de Rafael Leão, quien había comenzado el partido en el banquillo. Sin embargo, el equipo seguía siendo impreciso y no lograba generar una ventaja clara. El Slovan estuvo cerca de mantener el empate, pero a los 70 minutos, un pase de Tomori permitió que Leão anotara un gol con una delicada vaselina, poniendo al Milan de nuevo por delante.
El tercer gol llegó poco después, cuando el Slovan cometió un error garrafal en la salida de balón, dejando a Tammy Abraham completamente solo para sentenciar el partido. El Milan parecía haber asegurado la victoria, pero aún así, el Slovan mostró algo de respuesta con un golazo de Marcelli desde fuera del área, pero Tolic, con una expulsión absurda, acabó con cualquier opción de reacción.
Finalmente, el Milan se llevó los tres puntos, pero no convenció en su rendimiento. A pesar de su triunfo, los italianos siguen lejos de su mejor versión, mientras que el Slovan sigue sin encontrar la manera de puntuar en esta edición de la Champions League. El Milan tiene ya nueve puntos y se aproxima a la clasificación a la siguiente fase, aunque su juego sigue siendo inconsistente. Sin embargo, Fonseca, entrenador del Milan, debe recordar que sin Leão, no hay éxito: el Milan depende mucho de su estrella portuguesa.