Ruben Amorim vivió un debut con sensaciones encontradas en su primer partido oficial al mando del Manchester United, ya que el equipo empató 1-1 ante el Ipswich Town en la jornada 12 de la Premier League.
Aunque los Red Devils empezaron de manera prometedora, el Ipswich logró igualar el marcador y el juego terminó en empate, dejando a ambos equipos con un punto.
El arranque del partido fue soñado para el Manchester United. Apenas al minuto y medio, Amad Diallo lanzó un centro preciso desde la banda derecha, que Marcus Rashford conectó de primera intención para abrir el marcador con un gol que parecía marcar el tono del encuentro. Sin embargo, tras el gol temprano, el Ipswich reaccionó rápidamente, tomando el control del balón y dictando el ritmo del juego en gran parte de la primera mitad.
Cerca del descanso, los ‘Tractor Boys’ lograron empatar gracias a un golazo de Omari Hutchinson. El joven inglés recibió el balón en el borde del área y sacó un potente remate que fue desviado por Noussair Mazraoui. Este desvío cambió la trayectoria del balón, haciendo imposible que el portero André Onana pudiera evitar el gol. El primer tiempo concluyó con el Ipswich dominando, dejando al Manchester United con mucho que corregir en la segunda parte.
En la segunda mitad, el Manchester United recuperó la posesión, siendo el equipo con más control del balón, pero las jugadas claras fueron pocas. Amorim intentó darle un impulso ofensivo al equipo al realizar una doble sustitución ofensiva, introduciendo a Joshua Zirkzee y Rasmus Højlund, pero el marcador permaneció inalterado. A pesar de los esfuerzos por conseguir el gol de la victoria, el partido terminó en empate, dejando a ambos equipos con un punto.
Este resultado deja al Manchester United con una sensación agridulce en el inicio de la era Amorim, mientras que el Ipswich Town celebra un valioso empate ante uno de los clubes más grandes de Inglaterra.