Estrategia Nacional del Sector de Hidrocarburos y Gas Natural busca asegurar la energía interna, pero sus incrementos en los precios de los combustibles afectan negativamente la frontera.
La reciente Estrategia Nacional del Sector de Hidrocarburos y Gas Natural, anunciada por el Gobierno Federal, genera impactos negativos en la frontera de Coahuila, entre ellos el aumento de los precios de las gasolinas y el gas licuado, así como un incremento en la cotización del dólar, que ahora supera los 20 pesos y se acerca a los 21 por unidad para diciembre.
El Plan Nacional promete beneficios para la economía nacional; sin embargo, la fuga de divisas hacia Estados Unidos persiste, particularmente en las zonas fronterizas, donde los residentes optan por comprar gasolina más barata y hacer sus compras navideñas en dólares antes de que la moneda aumente aún más.
La estrategia. Luz Elena González Escobar, secretaria de Energía, presentó el Plan Nacional durante la conferencia matutina, señalando que el objetivo principal es garantizar una fuente estable de energía para satisfacer la demanda interna y disminuir la dependencia de las importaciones de combustibles fósiles, mientras se promueve el desarrollo sostenible. Además, se busca mantener una reserva suficiente para al menos 10 años de consumo, entre otros propósitos.
Durante la conferencia, se subrayó que el sector de los hidrocarburos es clave para generar divisas, y que la recaudación fiscal derivada es crucial para el desarrollo económico. Asimismo, se prevé que la estrategia creará miles de empleos directos e indirectos.
Impacto en la inflación. Comerciantes fronterizos aseguran que, aunque la propuesta del Plan Nacional parece prometedora, su implementación está tardando, y mientras tanto, el aumento de los combustibles afecta a toda la población.
"Es sabido que cuando suben los combustibles, todo lo demás comienza a encarecerse. Es una cadena que nos impacta a todos", comentó Héctor Rodríguez López.
El incremento en los precios de las gasolinas lleva a los habitantes de la frontera a cruzar los puentes internacionales para abastecerse de combustible más barato en Estados Unidos, lo que agrava la fuga de divisas, incluso con un dólar más caro.
Precios actuales. En octubre de 2024, el precio del litro de gasolina "Magna" o "Verde" (la más consumida) era de 18.50 pesos; esta semana subió a 19.60 pesos, un incremento de 1.10 pesos. La Premium pasó de 21.50 a 21.60 pesos, mientras que el diésel aumentó de 22.50 a 23.60 pesos por litro.
El costo de los combustibles influye directamente en la movilidad y la economía del país, y actualmente, la gasolina en el sur de Texas es más barata que en la frontera de Coahuila, debido a la diferencia en la cotización del peso frente al dólar.
Cotización del dólar. A mediados de año, el peso mexicano logró romper la barrera de los 18 y 17 pesos por dólar, llegando incluso a los 16.80 pesos en la frontera, reflejando una recuperación del "superpeso". Sin embargo, desde inicios de noviembre, la cotización ha escalado a 20.50 pesos a la venta y 19.30 pesos a la compra. Durante el fin de semana, algunos cambistas lo colocaron en 20.90 pesos "para no perderle". Especialistas advierten que la divisa estadounidense podría superar los 21 pesos hacia finales de año debido a la alta demanda por las festividades navideñas.
Este energético, al igual que las gasolinas, es ampliamente utilizado como combustible, aunque su mayor consumo se da en los sectores doméstico, comercial e industrial. Es esencial para la vida cotidiana de los fronterizos.
A principios de noviembre, el precio del kilogramo de gas natural subió de 9.40 a 9.72 pesos, y a partir del lunes se incrementó a 9.82 pesos, un aumento de 10 centavos que impacta directamente a los consumidores, sobre todo en otoño e invierno, cuando la demanda aumenta considerablemente.
Perspectiva del IMCO. El Instituto Mexicano para la Competitividad advierte que, aunque la estrategia tiene objetivos ambiciosos, carece de una ruta clara para su implementación. También recalca que, al priorizar el consumo nacional, debe evitarse un impacto negativo en los ingresos del Gobierno Federal. Cabe mencionar que, en 2023, las exportaciones petroleras ascendieron a 33.2 mil millones de dólares. Es crucial establecer una hoja de ruta clara, acompañada de políticas que mitiguen los efectos negativos a corto plazo y garanticen beneficios.