La máquina inspiró al equipo hondureño
En marzo de 1994, inspirado por el Cruz Azul de México, se fundó Cruz Azul Lagunas, equipo que milita en la Tercera División de Honduras. En sus 30 años de vida, la Máquina de Centroamérica presume un ascenso a Segunda División, su máximo logro, pero también ha sufrido por mantenerse vigente, incluso tuvo un receso de más de ocho años, hasta que regresó en el 2020 con Fernando Mendoza como presidente, quien inculca en sus jugadores la persistencia del conjunto de La Noria.
Estrella Azul fue el primer nombre del equipo hondureño, pero evitar mezclarse en temas políticos, debido a que hay un equipo que su logo es una estrella azul, los habitantes optaron por llamarle Cruz Azul, conjunto que seguían los habitantes de San José Colinas, localidad en la que radica el club cementero de Centroamérica.
“Decidieron ponerle el nombre de Cruz Azul y también siempre va inspirado en Cruz Azul de México, lógicamente ya existía en el año 1994 Cruz Azul de México, entonces a raíz de eso hicieron como una conjugación y llevaron a ponerle Cruz Azul de San José de Colinas”, relata Fernando Mendoza en entrevista
Cruz Azul Colinas tardó 10 años para conseguir el gran logro de su historia. En el 2004, la Máquina hondureña ascendió a la Segunda División tras imponerse en la final a la filial de Deportivo Real España, lo que desencadenó una fiesta celeste en San José de Colinas. La Máquina hondureño estuvo siete años cerca de la Primera División, incluso en el 2006 llegó a semifinales, pero en el 2011 aparecieron los problemas económicos y el equipo entró en un receso.
“Es bien complicado el tema económico para los equipos, casi no hay mucho apoyo, la gente tiene poco interés en apoyar económicamente los equipos, no les satisface a ellos hacer donaciones como para los equipos de Liga Nacional o patrocinio por decirlo de esa forma. Se vino una debacle dentro del equipo, directivos que se retiraron por el factor económico, ya no era sostenible la plaza en nuestro municipio para mantenerlo en Segunda División, entonces en esa época vino una debacle económica”.
Finalmente, en el 2020, Fernando Mendoza, quien había vivido su infancia pegado a la Cruz Azul Colinas, incluso llegó a ser mascota del club, decidió revivir a la Máquina de Honduras con apoyo de amigos, debido a las raíces que dejó esa Máquina en la población de la demarcación.
“Les platiqué de que volviéramos a revivir a Cruz Azul, que tenía que ser un equipo que permanentemente tenía que estar en la liga acá de San José de Colinas porque Cruz Azul ha representado muchísimo el nombre del municipio, de hecho, por Cruz Azul muchas personas conocen nuestro pueblo”.
Cruz Azul de México, un ejemplo de perseverancia para la Máquina de Honduras