En pacientes hospitalizados por dengue en México, los serotipos DEN-2 y DEN-3 estuvieron asociados con una mayor mortalidad en comparación con el serotipo DEN-1. Además, los desenlaces fatales fueron más frecuentes en personas de mayor edad y aquellas con comorbilidades como diabetes tipo 2 o enfermedad renal crónica.
Este hallazgo proviene de un estudio retrospectivo que analizó datos proporcionados por el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (SINAVE) sobre 18,436 pacientes hospitalizados por dengue en México entre enero de 2020 y junio de 2024. Todos los pacientes (54,8% mujeres, edad promedio de 27 años) fueron confirmados por pruebas de reacción en cadena de la polimerasa por transcriptasa inversa (RT-PCR), excluyendo aquellos diagnosticados por serología.
El objetivo principal del estudio fue evaluar la mortalidad intrahospitalaria por cualquier causa, y se usaron modelos de regresión lineales generalizados para identificar factores de riesgo asociados con una mayor mortalidad.
Durante el periodo estudiado, se registraron 323 muertes intrahospitalarias, con una tasa de letalidad general de 17,5 por cada 1,000 casos. El serotipo DEN-2 se asoció con un aumento del 81% en el riesgo de muerte en comparación con DEN-1 (riesgo relativo [RR]: 1.81; IC 95%: 1.15-2.86; p = 0.010). El riesgo fue aún mayor con DEN-3, con un aumento del 87% (RR: 1.87; IC 95%: 1.19-2.92; p = 0.007). Sin embargo, el riesgo con el serotipo DEN-4 no mostró significancia estadística.
Además, factores como la edad avanzada (RR: 1.02; IC 95%: 1.01-1.03), antecedentes de diabetes tipo 2 (RR: 2.07; IC 95%: 1.45-2.96; p = 0.001) y la presencia de enfermedad renal crónica (RR: 3.35; IC 95%: 2.03-5.51; p = 0.001) también se asociaron con un mayor riesgo de mortalidad intrahospitalaria por dengue.
Los autores concluyeron que estos resultados enfatizan la necesidad de desarrollar una estrategia integral de salud pública para abordar el dengue, considerando tanto el impacto del virus como la susceptibilidad individual de los pacientes. Propusieron que futuros estudios confirmen estos hallazgos en diversas poblaciones y exploren las vías biológicas que contribuyen a la gravedad de la enfermedad.