Científicos han encontrado evidencia en moscas de la fruta que sugiere que la mifepristona, un fármaco comúnmente utilizado para inducir el aborto, podría tener efectos antienvejecimiento. Sin embargo, es necesario realizar más investigaciones en humanos para confirmar este descubrimiento.
La mifepristona es un esteroide sintético que se ha utilizado en humanos para tratar diversas afecciones. Aunque es más conocida por su uso en abortos médicos en las primeras etapas del embarazo, también se ha utilizado para tratar endometriosis, fibromas uterinos y niveles elevados de glucosa en sangre en pacientes con enfermedad de Cushing. Dado que hay estudios que indican que esta droga podría contrarrestar los efectos del envejecimiento en la mosca de la fruta (Drosophila), los investigadores de este estudio buscan profundizar en el tema.
El equipo de la Universidad de California del Sur comparó directamente los efectos de la mifepristona en moscas hembras con los de la rapamicina, un inmunosupresor que ha mostrado potencial antienvejecimiento. Descubrieron que ambas drogas, administradas por separado, aumentaban la longevidad de las moscas, aunque la mifepristona demostró ser más eficaz, extendiendo la vida de las moscas en un 114% en comparación con el 81% que logró la rapamicina.
Sin embargo, cuando se combinaron las dos drogas, las moscas presentaron una menor longevidad, lo que sugiere que ambas actúan de manera similar para mejorar la duración de la vida. Experimentos adicionales del equipo indican que ambas sustancias logran esto al aumentar la capacidad celular para eliminar mitocondrias dañadas o disfuncionales, un proceso conocido como mitofagia. Las mitocondrias son responsables de producir la mayor parte de la energía en una célula, y a medida que los organismos envejecen, incluida la especie humana, esta función de limpieza tiende a deteriorarse, contribuyendo a los efectos negativos del envejecimiento.
“Los datos sugieren que la mifepristona y la rapamicina actúan a través de una vía común para mejorar la esperanza de vida de la mosca hembra Drosophila”, señalaron los investigadores en su estudio publicado este mes en la revista Fly.
Es importante recordar que las moscas de la fruta no son humanos, por lo que no está claro si estos efectos antienvejecimiento se aplicarían a los seres humanos. No obstante, existen evidencias de que la rapamicina puede mejorar ciertos marcadores de envejecimiento y se está evaluando en ensayos clínicos. Dado que la mifepristona es relativamente económica y segura, los investigadores podrían enfrentar menos obstáculos logísticos para realizar ensayos sobre su potencial efecto antienvejecimiento en humanos.
Además de la mifepristona y la rapamicina, hay otros medicamentos en estudio por sus posibles efectos antienvejecimiento. El mes pasado, un estudio encontró evidencia en monos de que la metformina, utilizada para tratar la diabetes y la pérdida de peso, podría extender la longevidad y la salud del cerebro y el hígado a medida que envejecemos.