Estadounidenses están implementando acciones y logística adecuadas para frenar el creciente flujo de migrantes de Medio Oriente en la frontera.
El Departamento de Seguridad Pública de Texas (TxDPS) ha alertado sobre el creciente número de inmigrantes procedentes de países como Irán que están cruzando por la frontera de Eagle Pass, una tendencia que está siendo considerada como una situación de interés debido a las implicaciones de seguridad.
El lunes por la mañana, un grupo de 30 indocumentados fue detectado cruzando hacia el norte de Eagle Pass, cerca de la pequeña comunidad de Normandy. En este grupo, llamaron la atención de las autoridades tres inmigrantes: dos provenientes de Irán y uno de Angola.
Reporte. En los últimos meses, los operativos de las autoridades fronterizas han registrado un aumento en el número de inmigrantes procedentes de países de Oriente Medio y África. Patrulleros estatales del TxDPS han reportado la detención de personas de Irán, Turquía y Egipto en diferentes operativos. La presencia de estos inmigrantes es considerada de interés debido a la naturaleza geopolítica de sus países de origen, lo que ha encendido alertas sobre posibles riesgos de seguridad.
El grupo detectado el lunes no solo incluía a los tres inmigrantes de interés, sino también a tres menores no acompañados, quienes fueron puestos bajo la custodia de la Patrulla Fronteriza.
Los niños, al igual que muchos otros menores en situaciones similares, serán procesados conforme a los protocolos de inmigración de los Estados Unidos, mientras las autoridades intentan reunirlos con familiares o llevarlos a centros de acogida. En otro incidente ocurrido también el lunes por la mañana, un grupo de 45 inmigrantes intentó cruzar el Río Bravo, en lo que se ha convertido en una de las rutas más peligrosas y frecuentadas por migrantes que buscan ingresar ilegalmente a los Estados Unidos. Los soldados de la Guardia Nacional de Texas, que han intensificado su presencia en la región bajo el programa Operation Lone Star, confrontaron al grupo, obligándolos a regresar al lado mexicano del río.
A su llegada a territorio mexicano, los migrantes fueron detenidos por oficiales de inmigración de México, quienes en los últimos meses han intensificado sus esfuerzos para colaborar en la contención de flujos migratorios irregulares. El cruce de inmigrantes por esta zona fronteriza ha aumentado de manera significativa, lo que ha llevado a un mayor despliegue de personal de la Guardia Nacional y a la colaboración de las autoridades locales con la Patrulla Fronteriza y el TxDPS.